Por Raúl Kollmann, en Página/12. Carlos Stornelli tampoco se presentó a declarar hoy ante el juez Alejo Ramos Padilla en la causa que investiga la red de espionaje ilegal. El fiscal lleva ya 65 días en rebeldía y en la indatagoria debía responder las siguientes acusaciones:
-Coacción al ex gerente de Pdvesa, Gonzalo Brusa Dovat. Lo amenazaron con armarle una causa en el fuero Penal Económico y D’Alessio lo obligó a declarar ante Stornelli. El falso abogado, que no tiene título ni matrícula, hasta estuvo presente dentro de la fiscalía de Stornelli.
-Pedido de realización de cámaras ocultas ilegales a los defensores José Manuel Ubeira y Javier Landaburu, ambos letrados en la causa de las fotocopias de los cuadernos. La prueba son capturas de pantalla del celular de D’Alessio.
-Espionaje ilegal al ex marido de la actual pareja de Stornelli, Jorge Castañon. Hasta hablaron Stornelli–D’Alessio de plantarle droga en una valija. Castañón fue categórico cuando declaró como testigo y también hay capturas de pantalla de los diálogos entre Stornelli y D’Alessio.
-Espionaje ilegal a empresarios uruguayos tratando de vincularlos con una causa de terrorismo para sacarlos de la cancha en una operación comercial.
-Extorsión e intimidación a Pablo Barreiro, hijo de un imputado que estuvo detenido. Barreiro dice que declaró ante Stornelli y contó que lo estaban extorsionando. La declaracion fue desechada.
-Participación en la extorsión contra Pedro Etchebest. El pedido de 300.000 dólares al empresario se hizo después de una reunión entre D’Alessio y Stornelli en Pinamar. Ramos Padilla no piensa que el fiscal haya estado detrás del pedido de dinero, pero sí que su relación espúrea con D’Alessio le permitió a este concretar la extorsión.