Por Alejandro Cano-comunicador.- El libro “Los muertos de Plaza de Mayo”, relata una parte fundamental de nuestra historia nacional reciente. Se trata de un período efervescente, la primera etapa del peronismo y de la reacción contra el gobierno que marcó para siempre nuestro destino.
En diálogo con Héctor de Arriba, el autor de este libro publicado por la editorial Dunkem, se puede armar una biografía todavía incompleta, del soldado y granadero Víctor Enrique Navarro, nacido en Libertador en el año 1934, que falleció a los 21 años en el sangriento bombardeo de Plaza de Mayo el 16 de Junio de 1955.
El autor destacó que el libro plantea las muertes en tres episodios distintos y que el objetivo es rescatar la memoria de los muertos en ese espacio público. La Plaza de Mayo como lugar de muerte por agresión y violencia política.
“Es un libro documentado con fuentes dela época y entrevistas a familiares, me llevó cinco años de trabajo para poner vida a eso nombres, muertos que cayeron en ese lugar, muchos rescatados por la historia y otros no”.
En relación al bombardeo de Plaza de Mayo hay que recordar que fue un ataque a toda la zona que tenía el objetivo de matar a Juan Domingo Perón. Fueron tres oleadas de bombas y ráfagas de ametralladoras, los granaderos tenían la función de defender al presidente.
De Arriba relevó para aquella trágica ocasión 214 muertos, de los cuales 9 eran granaderos, uno era un jujeño de Libertador General San Martín. Lamentablemente es el único granadero cuyos restos no regresaron a su provincia natal. Fue inhumado en el cementerio de Chacarita. Los otros granaderos muertos fueron trasladados en tren a sus respectivas provincias con el cortejo de honor correspondiente.
El granadero Navarro estaba en la sección de artillería pesada y estuvo combatiendo en la terraza contra los aviones que atacaban Casa Rosada. En ese lugar falleció. Se sabe que tuvo una hermana que falleció en San Salvador de Jujuy en el año 2015 a los 85 años, llamada Ana Yolanda Navarro, viuda de Raúl Boyé.
Para finalizar el autor menciona la posibilidad de presentar el libro en Libertador Gral. San Martín y ampliar la búsqueda de familiares que puedan aportar a reconstruir la figura del granadero ledesmense Víctor Enrique Navarro.