La vicepresidenta de la Nación y titular del Senado, Victoria Villarruel, encabezó este lunes la reunión de labor parlamentaria con los jefes de los bloques en la que diagramaron la sesión del próximo miércoles en la que se debatirá la ley de Bases y el paquete fiscal.
En el encuentro, se definió que ambos proyectos se debatirán por separado y la votación será por capítulos.
Para la discusión de Bases en la cámara alta, los titulares de los bloques acordaron que tendrán 10 oradores por bloque. El justicialismo, que se divide en dos bloques (Frente Nacional y Popular y Unidad Ciudadana), pero funciona como interbloque en la práctica, también se ajustará a la propuesta.
Es decir, el bloque UC, que conduce Juliana Di Tullio (Buenos Aires), y el FNP, que lidera José Mayans (Formosa), se repartirán los 10 discursos de un total de 33 senadores que componen ambos espacios.
Por otro lado, en el paquete fiscal la lista de oradores se reduce a 5 por bloque con la misma lógica que en Bases. A esto se sumarán los discursos de cierre de los presidentes de los bloques.
A su vez, no descartan que la sesión pueda dividirse en dos partes con un cuarto intermedio como ocurrió en la Cámara de Diputados durante el debate de la ley de Bases madre, en febrero pasado.
Esta modalidad vaticina una profunda discusión tanto en Bases como en el paquete fiscal. El dictamen de mayoría que logró llevarse el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, el pasado 29 de mayo no conformó a muchos. Eso quedó plasmado con la gran cantidad de firmas en disidencia.
Por esa razón, la votación por capítulos se vuelve un escenario utópico para La Libertad Avanza, ya que varios senadores aspiran a modificar artículos durante la votación en particular. En el mejor de los casos, hasta el propio oficialismo podría impulsarlos.
El ejemplo más claro es el caso de Aerolíneas Argentinas. Al encontrarse dentro de un paquete de empresas estatales a la privatización, los legisladores por su eventual venta podrían hacer caer el capítulo completo.
En este contexto, se espera que la discusión de la ley de Bases, previa al inicio de su votación en general y particular, respectivamente, dure más de 6 horas.
Este escenario resalta la idea de un eventual cuarto intermedio que se retomaría con el debate del paquete fiscal el jueves.
Ley Bases
Para el caso de los miembros informantes, la ley Bases tendrá como defensor del dictamen de mayoría al presidente provisional del Senado y titular de la comisión de Legislación General de la Cámara alta, el libertario Bartolomé Abdala (San Luis), quien por la noche quedaría a cargo de la sesión por el viaje a Europa de Javier Milei, lo que llevará a Villarruel a comandar el Ejecutivo. En tanto, por el despacho de minoría lo hará Martín Lousteau, ya que fue el único que presentó un texto alternativo.
Para la ley Bases se estima, si se considera el supuesto interés de los legisladores para disertar, entre cinco y siete horas antes de la definición en general del proyecto.
Después vendrá el tratamiento en particular, donde senadores podrían proponer modificaciones al dictamen de mayoría que empujan el oficialismo y una oposición dialoguista que, por momentos, parece estar atada con alambres.
El texto en cuestión tiene 10 títulos y 31 capítulos. Si se agregan las eventuales separaciones de artículos se realizarían, como mínimo, al menos 35 votaciones sobre este tema.
Paquete Fiscal
En cuanto al paquete fiscal, el líder de La Libertad Avanza, Ezequiel Atauche, defenderá el dictamen de mayoría por ser el presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda.
Si bien se espera que se respeten los tiempos, tanto miembros informantes como jefes de bloque tendrían un aliciente en caso de necesitar algunos minutos extra. Por el despacho de minoría estará Lousteau.
Para el oficialismo, no debatir ambas iniciativas de manera conjunta significa un paso hacia atrás, debido a que cada hora que se extienda el encuentro derivará en una lupa sobre legisladores para sostener el quorum antes de las votaciones, una situación siempre delicada a la hora de las picardías.