Tres de los cuatro gendarmes imputados por el asesinato de Ivo Rodrigo Torres en La Quiaca recuperaron su libertad, aunque siguen acusados como partícipes necesarios. El cuarto, indicado como autor material del crimen, permanecerá con prisión preventiva.
La decisión de liberar al subalférez Alexander Gunther, el cabo primero Marcos Leonardo Wysniewki y la cabo Juliana Enciso la tomó el juez de garantías Esteban Eduardo Hansen tras una audiencia celebrada este viernes.
El abogado de la familia Torres, Sebastián Espada, explicó a El Submarino Radio (FM Conectar 91.5) que el sargento Walter Daniel Álvarez, imputado como autor de los disparos que el 6 de febrero pasado acabaron con la vida del joven, seguirá detenido porque se le dictó prisión preventiva por tres meses.
«A las otras tres personas, que están señaladas como partícipes, que ayudaron a que se cometa el delito, se les había dado prisión preventiva por tres meses, a partir del 9 de febrero. Luego la Cámara de Salta redujo esa preventiva a un mes, que se cumplía hoy», detalló.
La investigación federal por la muerte de Ivo Rodrigo Torres está a cargo del fiscal Federico Zurueta, quien no participó en la audiencia de este viernes. En su lugar, estuvo la doctora Cura, quien expresó que, a su entender, ya no existen peligros procesales para seguir teniendo a estas personas privadas de su libertad hasta tanto no se dicta una sentencia definitiva.
Del lado de la querella, el abogado Espada se opuso «porque hay un verdadero peligro de fuga», consideró. Y argumentó: «Ellos conocen todos los pasos fronterizos no oficiales, y también conocen la mecánica con la que Gendarmería trabaja con todos esos sitios, a qué hora se hacen los recorridos. Además está la camaradería entre miembros de la fuerza. Entonces uno puede pensar que existe la suerte de que pidan algún favor».
La liberación de los tres gendarmes imputados se dictó con algunas condiciones, como que deben entregar sus documentos de identidad y concurrir una vez por semana a la comisaría más cercana a su domicilio para demostrar que no se ausentaron. Para Espada estas medidas tampoco son una garantía. «En siete días pueden estar en otro punto del hemisferio, con absoluta tranquilidad», estimó.
Consultado sobre si desde la querella van a apelar la liberación de los tres imputados, el abogado dijo que va a analizarlo junto con la familia de Ivo. Pero adelantó que posiblemente se abstenga de hacerlo. «No queremos entorpecer el avance de la causa, y queremos que cuanto antes se formalice la acusación y se pase al debate», indicó.
-¿Cómo tomó la familia la liberación de los tres efectivos?
-La familia no sabe de proceso penal. Uno les explica, hasta cierto punto, pero les duele un montón. Es como que se les vuelve a quebrar el corazón. De alguna manera, lo vuelven a perder a Ivo. La sensación de injusticia les invade el corazón. Recién hablé con el hermano de Ivo. Es muy difícil para una persona que perdió un hijo, que perdió un hermano, explicarle las garantías del debido proceso. Obviamente están muy dolidos.