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Hasta que el fiscal penal Diego Cussel, que investiga la muerte de Gladys Condorí, no cambie la carátula de la causa por la de «femicidio», los dos hijos de la mujer fallecida la semana pasada en Humahuaca están legalmente bajo la custodia del padre, quien fue detenido junto a otras tres personas en el marco de la investigación.
El último sábado fue detenido Héctor Humana, expareja de Gladys y padre de sus dos hijos, además de un hombre y dos mujeres que serían familiares de ella.
De acuerdo a las primeras diligencias y luego de escuchar a los principales testigos, Cussel deberá pasarle la casa a su colega Alejandro Bossatti, quien está al frente de la Fiscalía de Violencia de Género del Ministerio Público de la Acusación.
Gladys Condorí falleció el domingo 20 de agosto en una casa del barrio 2 de Abril de la ciudad de Humahuaca, en momentos en que celebraba a la Pachamama junto a la familia de su expareja. En un principio se habló de un suicidio, pero los médicos forenses determinaron que tenía el hígado y el bazo destruidos, y presentaba golpes de vieja y actual data.
Gladys era madre de dos niños de 7 y 4 años de edad. Amigas y familiares aseguraron que sufría violencia de género desde hacía mucho tiempo, y que ese había sido el motivo de haberse separado de su pareja.
Verónica Vilte, responsable del Centro de Atención Integral de Víctimas de Violencia de Género, aseguró en diálogo con El Submarino Radio (91.5) que, a su entender, se trata de un femicidio que debe ser investigado como tal.
-¿Se puede decir que la muerte de Gladys Condorí es el octavo femicidio del año en Jujuy?
-Hasta ahora no le puedo decir la carátula, porque están en investigación todos los hechos. Hubo muchísimas irregularidades, pero desde el Centro de Atención, junto con la Secretaría de Paridad de Género de la Provincia, hablamos de femicidio por todo lo que ocurrió y por las causas de la muerte.
-¿Qué falta demostrar?
-Todavía no están los resultados de la autopsia, pero el certificado de defunción que se expidió a la familia dice que la causa de la muerte es un politraumatismo hepático con laceraciones en el riñón y rotura de bazo. Por eso hay que investigar cómo fue la muerte. Lo que sí sabemos es que no fue un suicidio. Ahora se está viendo de cambiar la carátula.
-¿Qué tarea está llevando adelante el Centro de Atención respecto de este caso?
-Yo estoy acompañando en todo lo que puedo a la familia, que está en un estado de conmoción muy grande, pero a la vez están muy fuertes, pidiendo justicia y aportando todo lo que saben con respecto al hecho de ese día. Ellos son del campo, y cuando llegaron se encontraron con esto. Entonces están dando todas las pruebas posibles para demostrar que ella sufría violencia. Ya fueron convocados por el fiscal para prestar declaración.
-Hay cuatro detenidos por la muerte de Gladis. Uno de ellos es su ex pareja. ¿Se verificaron los antecedentes de violencia?
-Nosotros decimos que es un femicidio porque la familia, cuando se acerca a nosotros, nos comenta que ella sufría violencia, y que nunca se animó a denunciar porque estaba bajo amenazas. Y la familia no le pudo brindar contención entonces ella no se animó a denunciar. Ahora hay que demostrar que es un femicidio, se tienen que hacer las investigaciones, porque todo ocurrió de forma muy extraña.
-¿Ustedes trabajan junto con el fiscal que investiga?
-Desde el Centro lo que hacemos nosotros es brindar contención a la familia de la víctima y darle asesoramiento, tanto jurídico como psicológico y social. Somos un equipo compuesto por una psicóloga, una asistente social y una abogada. En general trabajamos con mujeres que sufren violencia, y una muerte así sería consecuencia de la violencia de género. Lo que buscamos hoy en día es justicia.
-¿Dónde están los dos hijos de la Gladys?
-No tengo información. El hecho ocurrió el fin de semana anterior y se estaba declarando como suicidio, y en ese caso queda el padre como tutor legal. Pero ahora hay que ver qué pasa. Todavía la carátula no se cambió, porque está en investigación.
