Mariano Cardozo, padre de familia domiciliado en calle Martín Fierro al 1600 de nuestra ciudad, tomó la decisión de llevar adelante una huelga de hambre, cosiéndose la boca, ante los reiterados pedidos ante el intendente Julio Bravo de dar solución a su situación, ya que, según Cardozo, luego de 12 años de trabajo, las causas de su cesantía no son claras, debido a que se aduce que posee un sumario administrativo por abandono de trabajo, falta en la que, según él, no habría incurrido.
En contacto exclusivo con Registro Informativo, el joven nos adelantaba que tendría pactada una reunión con el ejecutivo para el día de mañana, con la intención de ofrecerle un destino de trabajo dentro del municipio, al tiempo que anticipó que, de no concretarse dicho ofrecimiento, estaría dispuesto a llegar hasta las últimas consecuencias.