«Va a llegar un momento donde la gente se va a morir de hambre. De alguna manera va a decidir algo para no morirse. No necesito intervenir. Alguien lo va a resolver», afirmó este miércoles el presidente Javier Milei en la universidad de Stanford en EEUU, en medio de la polémica por la falta de entrega de 5.000 millones de kilos de alimentos, en un marco donde la pobreza ronda el 49%.
Lo dijo durante la presentación de su último libro «Capitalismo, socialismo y la trampa neoclásica» frente a los estudiantes del Instituto Hoover, en California. Allí, deslizó fuertes críticas al socialismo y a la regulación estatal.
Sin embargo, en un momento de la presentación, deslizó una declaración que dejó atónito a todo el auditorio y que rememoró las épocas en las que hablaba de «venta de órganos» o defendía «libertad de la gente para morirse de hambre».
«¿Se creen que la gente es tan idiota? Va a llegar un momento donde la gente se va a morir de hambre. Va a decidir algo para no morirse. No necesito que alguien intervenga para resolverme la externalidad de consumo, porque alguien lo va a resolver», deslizó Milei, dejando sin palabras a todo el público.
Esta es la segunda vez en la última semana que Milei se refiere al tema del hambre. Durante de la 81° Exposición Angus en La Rural, sostuvo que «si la gente no llegara a fin de mes se estaría muriendo en la calle», al responderle a un ciudadano que le recriminó que «la gente no llega a fin de mes».
«Cuando más intervención hay, cuando más se violente y se vulnera el derecho de propiedad, la señal que se trasmite cada vez es peor. En el límite, en el socialismo real y propiedad privada, no hay sistema de precios y el sistema se derrumba. Por eso, en todos los lugares donde se aplicó el socialismo fue un fracaso en lo económico, en lo social y en lo cultural. Y además, como exacerba la violencia de los políticos, han terminado asesinado a 150 millones de seres humanos», sostuvo en línea con sus recientes discursos cada vez que viaja al exterior.