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Comunidades de la puna paralizaron el proyecto instalado en las Salinas Grandes, denominado Pristine Camps, que consiste en un campamento de superlujo que tiene fecha de inauguración para el 1° de noviembre y ya vendió todas las plazas para ese mes. Exigen la documentación sobre el estudio de impacto ambiental y quieren saber quién autorizó el proyecto, ya que no fueron informadas.
El viernes pasado, las comunidades Santuario de Tres Pozos, San Miguel de los Colorados, Pozo Colorado y Ojo del Solar sostuvieron una permanencia en las Salinas Grandes reclamando que se levantaran los domos ya instalados. El rechazo se fundamenta en que, a pesar de habitar esos territorios, no se les dio participación en la consulta previa, libre e informada que prevé la legislación que protege sus derechos.
Los comuneros que encabezaron la protesta, que terminó con la paralización de la obra, señalaron que pares suyos, en acuerdo con el gobierno provincial, dieron la autorización a pesar de que los territorios en cuestión comprenden a un total de 33 comunidades. Dicha autorización se basó en que el emprendimiento no perjudicaría el territorio ni consumiría agua, según explicaron en un documento firmado por Oscar Toconás, referente de las comunidades Saladillo y Alfarcito, y Mario Cruz, de Huachichocana.
Quienes se oponen al proyecto aseguran que no cuentan con información sobre quién dio la autorización por escrito para que se lleve adelante, y cuestiones puntuales como el modo en que se desecharán las aguas servidas y los residuos que se generen, aspectos que deberían estar especificados en el correspondiente estudio de impacto ambiental.
Tras permanecer por dos días en el lugar, lograron que se paralice la instalación. Ahora aguardan que las autoridades provinciales y los responsables del proyecto les entreguen la documentación correspondiente.
El proyecto
El emprendimiento Pristine Camps Salinas Grandes está ubicado en la concepción Mina Nora. Fue anunciado en julio pasado y se presenta como un “campamento de lujo” que se convertirá en “un ícono de la hotelería” que se destacará por ser “el hotel más sostenible del país”.
El de Salinas Grandes será el primero de varios proyectos similares en distintos puntos del país.
Para llevarlo adelante, la consultora Glamping Argentin afirmó un acuerdo con la cooperativa Cachi del Chincho Limitada, de la comunidad Aguas Blancas, lo que permitió iniciar la instalación del complejo. La empresa aseguró que para la obra se capacitó y empleó a personas de la comunidad.
El campamento de lujo ocupa una hectárea de las 100 que posee la comunidad Aguas Blancas, a unos 8 kilómetros de la ruta 52. Además de las habitaciones armadas dentro de domos, tendrá un restaurante con capacidad para 24 personas y un espacio para pequeños eventos corporativos. Ofrece también excursiones guiadas por integrantes de la comunidad.
Sobre el impacto ambiental que podría tener el emprendimiento, sus responsables aseguran que será “mínimo”, ya que, por ejemplo, no usaron cemento ni hormigón en su construcción, y todos los edificios y construcciones estarán asentados sobre pilotes de madera, que al retirarse, no dejan ningún rastro.
Sobre el agua, afirman que llegará desde una perforación en la comunidad, a 25 kilómetros del lugar, y que la de las duchas y lavamanos se reutilizará en los inodoros para luego ir a un reservorio bajo los domos. Los residuos grises se tratarán en un biodigestor de la comunidad, generando un residuo orgánico que se utilizará como abono.
Una noche en la habitación doble Suite Exclusive para noviembre, considerada época de temporada alta, con todo incluido, cuesta 682 dólares más 15% de impuestos. Las reservas para todo el mes de noviembre ya están cubiertas.
