Esquivel: «Por esta vía de ejercer el poder, son capaces de hacer cualquier cosa»

“La libertad de Milagro es pieza fundamental para iniciar un diálogo sobre cualquier otra cosa”, aseguró en diálogo con El Submarino Juan Manuel Esquivel, diputado provincial por el Fuyo y responsable del área educativa de la Organización Barrial Tupac Amaru, quien agregó que “el tema del trabajo ya no es un tema importante”.

Esquivel descree de las afirmaciones del gobernador Gerardo Morales, quien aseguró que va a garantizar los planes, la educación y la salud de los integrantes de las organizaciones sociales. Para reafirmar su lectura, echa mano al decreto que firmó el propio mandatario junto a todos sus ministros y lo desmenuza, desde lo político y lo jurídico.

-En sus últimas declaraciones, Morales aseguró que va a garantizar “los planes, la educación y la salud”. ¿Qué opina?

-No, no es así. En el decreto 403, del 14 de enero, que el gobernador de la provincia firma con todos los ministros, dice que todas las personas que a esa fecha estaban en el acampe estaban cometiendo un delito, y que por eso quedan suspendidas las personerías jurídicas y habilitaciones de las cooperativas. Y en el artículo 5 dice que todos los que estuvieron quedan imposibilitados de recibir toda asistencia del Estado provincial y nacional. Es decir que el gobernador decretó que hay un delito, sin que hubiera la actuación de ningún juez y ni siquiera usando una expresión del tipo “supuesto delito”.

-Por lo que se ve, está lejos la solución.

-Así es. Si se animan a cosas así, por esta vía de ejercer el poder, son capaces de hacer cualquier cosa. La han tenido a Milagro a disposición del Poder Ejecutivo provincial durante 15 días, y veinte días casi secuestrada, sin notificarle la causa de la detención y sin que ella pudiera designar a su abogado. El viernes le dictaron la libertad pero siguió detenida, y durante tres días no tuvo una notificación sobre la causa, porque recién el lunes el juez la llamó para notificarla y para que designe oficialmente a su abogado.

-Morales dice que mantuvo contactos con referentes de organizaciones sociales.

-Ayer (por el martes), los referentes de la Tupac Amaru, los que coordinan sectores y tareas, y representantes de otras organizaciones sociales, estaban todos en asamblea, a la misma hora que él dice que estuvo con referentes de nuestra organización. Lo único que puedo decir es que me resulta extraño que haya dicho eso.

-¿Cómo hay que interpretar el levantamiento del acampe en la Plaza Belgrano?

-Como un cambio de estrategia. Hay que recordar que el acampe se originó hace cincuenta días a partir del pedido de audiencia al gobernador para que garantice el trabajo para la Red de Organizaciones Sociales en general y la Tupac Amaru en particular. Los compañeros, a partir de las circunstancias nuevas, determinaron cambiar de estrategia y renovar la forma de pedirle a la autoridad.

-¿Cuál será esa forma ahora?

-Medidas de fuerza o acciones directamente proporcionales al silencio del gobierno sobre el tema. En principio, los compañeros decidieron cambiar de lugar y un grupo se trasladó a Buenos Aires, y se irán renovando los representantes en el acampe de Plaza de mayo. Ocurre que a partir de la detención de Milagro Sala, que estuvo a disposición del Poder Ejecutivo provincial, cambió uno de los ejes del reclamo, que ha tomado dimensión nacional e internacional. La detención de Mialgro Sala ha sido observada por organismos técnicos legales internacionales como ejemplo de un uso arbitrario de la justicia y de persecusión política, con denuncias de toda laya. Hoy cualquiera se para frente a un micrófono y denuncia y además condena, mientras en la justicia no hay más que un par de causas que también están observadas por organismos jurídicos internacionales, por juristas de nuestro país, que advierten irregularidades y falta de independencia, que por otra parte fue uno de los ejes de campaña de este gobernador. Esto es lo que se está reflejando en Buenos Aires, con cientos de organizaciones de todo el país, con la adhesión de personalidades políticas, culturales y sociales.

-Gerardo Morales siempre reivindicó el camino del diálogo. ¿Hubo diálogo?

-No, hasta el momento no hubo ningún diálogo; nadie ha sido invitado a ningún escenario donde se dialogue, donde se vea a las partes sentadas hablando de los temas que nosotros plateamos en las notas que presentamos, el trabajo, las condiciones, la intensidad y la urgencia del trabajo. De eso no se habló jamás. No hubo nunca mesa de diálogo.

-¿No está prevista ninguna reunión con ningún funcionario de gobierno?

-No. Y ha quedado claro para los compañeros que la libertad de Milagro es pieza importantísima para iniciar un diálogo sobre cualquier otra cosa. Hace tres semanas que reclaman la libertad de Milagro, que es una perseguida política y presa política, a disposición del Poder Ejecutivo provincial. El tema del trabajo ya no es un tema importante. Los compañeros, sin que nadie les prometa nada, están dispuestos a volver a trabajar en las piletas, en los barrios, porque quieren recuperar eso que ha identificado siempre a la organización.

-¿Ahora están trabajando?

-Sí, desde temprano. Ya están haciendo el mantenimiento de las piletas y los parques, planeando colonias y actividades de esparcimiento para los niños en los barrios, organizando las cuadrillas para limpiar y recuperar los espacios verdes. El área educativa inicia las actividades el 10 de febrero, como está previsto. Así vamos recuperando la acción que venía desarrollando la Tupac.