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Al gobernador Gerardo Morales no le gustan las casas de juego de azar, a las que calificó de «preversas», y aseguró que «las cerraría todas», aunque luego aclaró que dejaría las que funcionan dentro de los hoteles, «por razones de desarrollo de la actividad turística».
Fue ante una consulta periodística que le hicieron luego de su participación en el precoloquio de Idea, en relación a la próxima inauguración de un nuevo casino sobre la calle Alvear, en pleno centro de San Salvador de Jujuy. “Estoy totalmente en contra, son perversas y las cerraría a todas”, afirmó Morales.
Respecto de la nueva sala, explicó que es producto de una licitación realizada en el año 2014, y remarcó como problema el hecho de que el local está a pocos metros de varios cajeros automáticos. Pero también se quejó para adelante: “La gestión anterior nos dejó además contratos de prórroga hacia 2017 y 2022, que son una trampa jurídica importante”, detalló Morales.
Puntualizó luego que a pesar de que «este gobierno no tomó ninguna decisión” sobre la sala de Alvear, sus responsables “ya le presentaron una demanda a la Provincia”.
“Es una trampa jurídica, porque está prevista para iniciar juicio, de modo que si no ganan a través de las máquinas tragamonedas, lo hacen por la industria del juicio», describió el gobernador, y agregó que desde el Ejecutivo se trabaja «para resguardar los intereses del conjunto de los jujeños”.
“Estamos en el tema y tomaremos medidas, pero con el cuidado de no hacerle el juego a esta gente que, por un lado u otro, siempre quiere ganar”, finalizó.
