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Se cumple la primera jornada del paro de 48 horas dispuesto por la Intersindical de Trabajadores Estatales (ITE), en el marco del plan de lucha por la recomposición salarial y en reclamo de que se cumpla el acuerdo firmado en agosto pasado. “Que el gobierno deje de mentir y ponga los números como son”, dijo a El Submarino Fernando Acosta, secretario general de ATE.
La medida de fuerza incluye hoy una serie de acciones en establecimientos escolares, con permanencia de delegados y docentes en huelga. En el caso de inicial y primaria, la totalidad de los maestros están de paro, en el marco de lo dispuesto por la Asociación de Educadores Provinciales (Adep).
En los niveles secundario y terciario, se trata de los profesores autoconvocados que no acordaron con la conducción de su sindicato, el Centro de Enseñanza Media y Superior (Cedems), que levantó las medidas para acatar la conciliación obligatoria dispuesta por la Secretaría de Trabajo.
La de hoy, según informaron, es “una jornada de lucha, con asambleas y actividades de difusión en los lugares de trabajo y escuelas”. Para mañana está prevista una movilización y acampe en la Plaza Belgrano, y desde la ITE se anuncia una profundización de las acciones de protesta.
La ITE solicita un aumento salarial de 22 por ciento retroactivo al mes de enero y un piso salarial de 4.900 pesos, y rechaza la oferta del 19 por ciento desde marzo y un piso de 4.320 pesos, que sí aceptaron el Frente de Gremios Estatales (FGE) y la Multisectorial, los otros dos colectivos de sindicatos de la administración pública.
Ayer Fellner denunció que existen “maniobras malintencionadas” del sector sindical que no aceptó la propuesta salarial, y señaló que “mienten a la sociedad con argumentos sin sustento ya que la realidad es otra”. Sostuvo que esto se suma a una modalidad de protesta “que se desbordó en los últimos días con hechos de violencia cometidos por parte de miembros de la Intersindical, ya no solo a edificios públicos sino también a trabajadores que no se plegaron a las medidas de fuerza e incluso hasta funcionarios provinciales sufrieron las consecuencias de este accionar sin sentido”.
Fernando Acosta, secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y referente de la ITE, comentó en diálogo con El Submarino los dichos del gobernador: “Es lamentable ocupar tanto espacio en los medios para no decir nada. El gobierno anuncia que va a ir a la justicia, que prioriza un derecho constitucional sobre otro”, interpretó.
“Todos esperamos una convocatoria –continuó Acosta-. De las dos últimas veces que hablamos, en la primera dijeron que estaban abiertos al diálogo y en la segunda se hicieron lo que no habían dicho nada”, y agregó: “Es común en este gobierno mentir y no cumplir las compromisos”.
Para el sindicalista, “cuando dicen que van a buscar soluciones más adelante, están subestimando a la gente, politizan la protesta”.
Acosta se refirió también a la posición adoptada por otros gremios del sector público: “Los sindicatos que firmaron la propuesta del gobierno son traidores –sentenció-; Santillán incluso les pega a los dirigentes que están peleando, diciendo que esta lucha es una interna entre Fellner y Milagro Sala”.
“La lucha es salarial”, definió Acosta, y agregó: “Lo que más me preocupa es que no se atienda el reclamo”. Llamó al Ejecutivo provincial a “poner números como son” para sentarse a discutir, e insistió: “Plata hay, el gobierno miente”.
Respecto de la continuidad del plan de lucha, señaló: “Hoy con el paro y mañana con la movilización vamos a demostrar que esta lucha es auténtica”, y recordó que la situación en las escuelas no está solo vinculada a la cuestión docente: “También está ATE en el conflicto, por la situación de los porteros. Hay miles que cobran 1800 pesos y un montón trabaja ad honorem, sin cobrar nada. Hay situaciones desastrosas”.
“Sin arreglo, no hay apriete ni amenaza que valga. Vamos a seguir luchando por nuestros derechos. No nos convencen porque sabemos que es mentira lo que dicen”, sostuvo Acosta, y advirtió: “Nos quieren dividir para quebrar la pelea, pero el problema no es la pelea sino lo que la genera, que son los sueldos de miseria y las pésimas condiciones de trabajo”.
