Este jueves se llevará adelante la audiencia preliminar del juicio en el que se está acusado Alberto Lemos, quien era administrador del Ingenio Ledesma en 1976, cuando se cometieron los secuestros en el marco de la llamada Noche del Apagón. En esta causa estaba procesado el dueño de la empresa, Carlos Blaquier, de cuya muerte se cumplirá un año el próximo 13 de marzo.
Se trata del séptimo juicio de lesa humanidad que se desarrolla en la provincia. La audiencia está prevista para las 15 horas de este jueves en el Tribunal Oral Federal de Jujuy ubicado en la calle Senador Pérez 187. H.I.J.O.S. (Hijas e Hijos por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio) Jujuy es querellante.
La causa se denomina «Blaquier, Carlos Pedro Tadeo s/ Inf. Art. 144 Bis en Circ. Art.142 Inc. 1, 2, 3, 5” y su acumulada. «Finalmente podremos sentar en el banquillo de los acusados a uno de los responsables/ideólogos civiles de la dictadura, el empresario Alberto ‘Boni’ Lemos», señalaron desde H.I.J.O.S. Jujuy en un comunicado.
En este proceso se dirimirá la responsabilidad de Lemos en los delitos cometidos contra alrededor de 50 víctimas. Las audiencias de este juicio, que iniciarían en abril, se desarrollarán los días jueves. Se estima que habrá unas 117 testimoniales.
«En esta causa también debería estar imputado el jefe y pariente de Lemos, Carlos Pedro Blaquier, el archiconocido empresario dueño del Ingenio Ledesma, empresa mundialmente distinguida como partícipe en delitos de lesa humanidad, ya que funcionó, antes y durante la última dictadura militar, como eje en la logística de la represión; trabajos de inteligencia, encarcelamiento, secuestro, desaparición y asesinato de cientos de personas oriundas del departamento Ledesma», remarcaron desde H.I.J.O.S.
¿Quién es Alberto “Boni” Lemos?
Desde la agrupación de derechos humanos recordaron que después de la muerte de su mentor Blaquier, Lemos quedó como único imputado en este juicio. Fue administrador del Ingenio Ledesma, mano derecha de Blaquier y conocedor pleno de las prácticas ilegales que la empresa desplegó en el ramal jujeño en aquella época, siendo parte ejecutora de las desapariciones y posteriores crímenes de militantes de organizaciones políticas y gremiales.
Destacaron que en esa zona «las y los trabajadores de la empresa Ledesma, en los 60 y 70 fueron parte de un enorme proceso de organización y lucha sindical de la clase obrera argentina».
«Blaquier y Lemos fueron la pata civil de la dictadura en Jujuy», afirmaron.
Lemos pasó 11 años esquivando el banquillo de los acusados. En 2012, lo indagó el juez Fernando Poviña sobre el rol que había tenido en el ingenio Ledesma durante la dictadura.
Lemos se preocupó por mostrarse como una persona dedicada a la ayuda social, más que al vínculo con la represión. Más allá de los esfuerzos, no pudo dar una versión coherente sobre el vínculo de la empresa con las fuerzas armadas y de seguridad.
En un primer momento, rechazó de plano haberles dado a los uniformados camiones o camionetas. Le dijo al juez que las fuerzas tenían sus propios vehículos. Sin embargo, después abrió una puerta: la empresa tenía más de 100 coches y él no sabía qué pasaba con cada uno de ellos. Algunos de esos transportes –se excusó– incluso quedaban en poder de los trabajadores durante las noches.
En 1985, ante la Comisión Extraordinaria de la Honorable Legislatura de Jujuy, Lemos ya había admitido que Ledesma les proveyó vehículos a las autoridades militares en 1978 cuando se desató el conflicto con Chile por el Canal Beagle y que también lo hizo en un episodio vinculado a inundaciones. En los papeles analizados por la justicia, también figura un compromiso de cooperación de la empresa con la Gendarmería de 1976.
En 2012, Poviña procesó a Blaquier y a Lemos por los secuestros que tuvieron lugar inmediatamente después del golpe de Estado y los que ocurrieron entre el 20 y 27 de julio de 1976 en lo que se conoció como las Noches del Apagón.
En marzo de 2015, la Cámara Federal de Casación revocó ambos procesamientos. La causa durmió durante seis años en la Corte Suprema, que en julio de 2021 sostuvo que la Casación había obstaculizado indebidamente el avance de la investigación.
«Llevamos décadas de impunidad en que lxs familiares de las víctimas y los organismos de derechos humanos, no solo de Jujuy sino a nivel nacional e internacional, exigimos juicio y castigo a los responsables civiles de la dictadura, algunos de ellos pudieron ser juzgados y condenados, otros, como Blaquier fueron beneficiados con la impunidad biológica», afirmaron desde H.I.J.O.S.
En este sentido, consideraron que este nuevo juicio de lesa humanidad que comienza en Jujuy «significa un avance importante, aunque tardío, de la justicia, poder ver a Lemos, que ha permanecido impune durante casi 50 años, imputado y a punto de ser condenado, esperamos con una pena ejemplar, es altamente reparador para lxs familiares de las víctimas y también para toda la sociedad».
«En este contexto adverso con un gobierno de derecha, negacionista y que se pronuncia pro dictadura y amigo de los genocidas sin pudor, seguimos firmes sosteniendo las banderas de memoria, verdad y justicia y sosteniendo de manera inquebrantable la realización de los juicios a los milicos, civiles y miembros de la iglesia responsables de los crímenes de la dictadura», concluyeron.
PARTE DE PRENSA 7MO JUICIO DE LESA