Por Partido Obrero de Jujuy (Tendencia Nacional del Partido Obrero). Gerardo Morales adelantó las elecciones provinciales para intentar retomar la iniciativa política contra los trabajadores jujeños. La rebelión del año pasado contra los femicidios, las autoconvocatorias docentes, las luchas de los municipales contra la precarización, los reclamos crecientes por el hambre, la desocupación y la falta de vivienda, son una manifestación inequívoca del agotamiento de sus métodos de cooptación, represión y persecución judicial.
Balance
La promesa oficial de una transformación de la matriz productiva provincial ha redundado en el remate del ingenio La Esperanza, el vaciamiento y cierre de la histórica mina El Aguilar, el cierre de Ex Incor y la Fundición el Aguilar, siempre en beneficio de estas patronales.
Bajo la pandemia, mientras el sistema de salud colapsaba, Morales dio vía libre a la explotación laboral y el incumplimiento de los protocolos de bioseguridad por parte de las mineras y los pulpos azucareros; y ha dilapidado los dólares que urgían para reforzar el sistema de salud en favor de los acreedores de la provincia.
El salto en los índices de pobreza es el resultado de esta política, como también que la provincia tenga el mayor índice de mortalidad por Covid del país, cuando argentina encabeza el récord mundial de muertes por millón de habitantes. Las clases presenciales ya se han cobrado la vida de 27 docentes en la provincia, también la tasa más alta del país.
Crisis de régimen y el FIT
Morales, un macrista de raza, no ha vacilado en cerrar filas con Alberto Fernández para defender los negociados capitalistas en la provincia. Por esto ha contado con el abierto aval del PJ oficial y la burocracia sindical peronista del Frente de Gremios Estatales para su política. Esta colaboración ha profundizado la disgregación de del PJ sin reforzar la precaria coalición gobernante entre radicales y peronistas (Primero Jujuy).
En este cuadro, el antagonismo de los trabajadores con el régimen político jujeño, que en el 2017 tomó forma en la gran elección del Frente de Izquierda, se profundiza. Sin embargo, la autoproclamación del FIT lo ha autoaislado de las más amplias y diversas expresiones de lucha de la provincia, ocasionando su retroceso electoral en 2019. La exclusión de la militancia del Partido Obrero jujeño de las listas del FIT en las próximas elecciones, busca evitar la discusión de este balance y poner una mordaza pública a quienes lo reclamamos.
Impulsemos un programa en favor de una salida de los trabajadores
Las diferentes listas que se presentan en las próximas elecciones no levantan un programa que plantee una salida en favor de los trabajadores a la presente crisis. El Partido Obrero jujeño, adherente a la Tendencia Nacional del PO, llama a las organizaciones obreras y populares, a los luchadores y activistas, los docentes y la primera línea de la salud, a no resignarse a la falta de alternativas electorales y al voto al “mal menor”.
Discutamos una caracterización y un programa con el cual intervenir en las próximas elecciones provinciales. Con los acuerdos que podamos establecer hagamos campaña por una boleta electoral que refleje los mismos y reforcemos así la organización y la lucha por una salida de los trabajadores a la actual crisis humanitaria.
Para ello ponemos a discusión los siguientes puntos:
Por un subsidio universal a todos los desocupados equivalente al 80% de la canasta familiar
Trabajo genuino, pase a planta y salario inicial equivalente a la canasta familiar
Suspensión de todas las actividades no esenciales con la cobertura del 100% del salario por parte de las patronales, comenzando por las clases presenciales, garantizando conectividad y recursos tecnológicos para alumnos y docentes por parte del estado.
Vacunas para todos. Abolición del régimen de patentes sobre las vacunas y estatización bajo control de los trabajadores de la industria farmacéutica.
Reforzamiento del sistema de salud para ampliar las camas de terapia intermedia e intensiva, reducir la jornada laboral y garantizar los insumos necesarios para una adecuada atención sanitaria de la población.
Por una bolsa de trabajo bajo control de las organizaciones de desocupados. Por el reparto de las horas de trabajo sin afectar el salario.
Urbanización de todos los asentamientos. Por un plan de viviendas populares de acceso universal para acabar con el hacinamiento y el déficit habitacional
Protocolos obreros para toda la actividad esencial. Ocupación de toda fabrica que cierre o despida, estatización bajo control de los trabajadores.
Contra la impunidad reinante; por una justicia responsable a los organismos conformados y electos por la población.
Para financiar éste programa, suspensión del pago e investigación de la deuda usuraria de la provincia. Estatización del Banco Macro, bajo control de los trabajadores. Por un impuesto extraordinario a las mineras y Ledesma.