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Tres efectivos de la Policía de la Provincia fueron detenidos e imputados por la manipulación de pruebas en la investigación de la fiscalía penal por el femicidio de Mariela Zamora. Uno de ellos, sería familiar del femicida y ocultó y manipuló pruebas intentando desincriminarlo a Pablo Ordoñez, que está imputado por el crimen de la mujer, tras agonizar en el hospital Pablo Soria.
La investigación iniciada de oficio está a cargo del fiscal José Alfredo Blanco, habilitado en Feria de la circunscripción San Pedro de Jujuy del MPA, quien imputó a los dos oficiales del delito de “incumplimiento de los deberes de funcionario público”, en tanto al jefe de la seccional le imputó el delito de “entorpecimiento funcional y abuso de autoridad”.
La novedad surge cuando Blanco junto a su equipo de investigación penal, ordenó el análisis de las pruebas, entre ellas el cuchillo secuestrado y los teléfonos celulares de la víctima y el acusado.
Todo este material secuestrado en el lugar del hecho quedó en resguardo de Criminalística, y fueron entregados al fiscal cumpliendo con los protocolos de preservación y seguridad de las evidencias. También, en el lugar del hecho, se secuestraron los teléfonos celulares de la víctima y el acusado.
Al convocar al Oficial actuante, quien asistió junto a personal de Criminalística al lugar del hecho, para que haga entrega de los celulares, manifestó no tenerlos, ya que los había dejado al Oficial de relevo de la Seccional 48.
Ante esto, el fiscal convocó al «oficial de relevo» para la entrega de los equipos, pero este indicó que le dejaron los celulares sin decir a que causa correspondían, por lo que entregó los mismos al jefe de la comisaría. Ambos policías incumplieron todo el procedimiento de resguardo de pruebas y custodia de las mismas.
Por este motivo, ayer en la tarde, los efectivos implicados y miembros de la Fiscalía fueron a la seccional para entrevistarse con el jefe de la misma, que llegó después del horario establecido.
Junto a testigos y personal de Criminalística, ingresaron antes que el uniformado a su oficina, y hallaron ambos teléfonos.
De la investigación surgió que el jefe de la Comisaria sería familiar del imputado, y la tenencia de los celulares resulta sospechosa, ya que no envió los equipos a la Fiscalía.
La sospecha por parte del fiscal radica en que siendo familiar no debió intervenir y no debió tomar contacto con la evidencia que en ese contexto era manipulable. En ese marco se procedió al secuestro de los teléfonos vinculados al crimen, realizando tomas fotográficas del lugar y el levantamiento de pruebas.
Ordoñez acusado de la muerte de Zamora, conoció causa de imputación “homicidio agravado por el vínculo y por violencia de género (Femicidio), designó abogado defensor y se abstuvo de prestar declaración como imputado.
