Gendarmeria Nacional incautó 94 cueros de vicuña con rastros de proyectiles

Durante un patrullaje realizado sobre la ruta nacional 52, en el Paraje Puerto de Lipán, Gendarmería Nacional encontró 94 cueros de vicuña que eran trasladados en un vehículo utilitario. Las piezas tienen rastros de proyectiles, lo que confirma que hubo matanza de animales. Hace algunos meses se denunció esta práctica habitual en la Puna jujeña. 

Personal del Grupo Purmamarca, dependiente del Escuadrón 53 Jujuy, procedió al decomiso de 94 cueros de la especie protegida la vicuña, por la cual puso en conocimiento del hecho y dio intervención a la Secretaría de Gestión Ambiental de Jujuy, organismo responsable por ley Provincial y Nacional de la tenencia de los mismos. 

 Técnicos de la Dirección Provincial de Biodiversidad, dependiente de la Secretaría de Gestión Ambiental, realizaron los procedimientos correspondientes de determinación de los datos biológicos de los cueros (medida del animal, del pelo, etc.), para obtener información y establecer la acción de caza ilegal, de acuerdo a la edad del animal (adultos, sub-adultos, tekes), rastros de proyectiles en los cueros, estado sanitario del animal, entre otros indicios.

 Debido a que la matanza de vicuña es un delito Federal, la Dirección Provincial de Biodiversidad procedió luego a la quema de todos los cueros incautados.

 En adelante Gendarmería pasará las actuaciones correspondientes, con lo cual se procederá a realizar el sumario ambiental a los infractores, cuyas identidades no fueron informadas, ni datos que indiquen si se trata de jujeños o personas de otros lugares.

Denuncias 

En diciembre pasado, el diputado provincial Pablo Baca (UCR) denunció la cacería indiscriminada de vicuñas, lamentando que no se hayan tomado medidas para proteger la integridad del territorio y sus recursos naturales y reclamó la presencia de autoridades nacionales y provinciales que tienen la responsabilidad de proteger esos recursos y vigilar la frontera. El legislador había recibido a Luciano Antonio Llampa, un pequeño ganadero de Vilama, quien denunció que entre junio y agosto se produjo una nueva matanza de vicuñas. 

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