Ibarra a Morales: «Están confundiendo la pelea política usando el Código Penal»

«Las diferencias políticas se confrontan políticamente, y no a través de jueces y fiscales que responden al gobierno», le dijo al gobernador Gerardo Morales el ex jefe de gobierno porteño Aníbal Ibarra, que estuvo el sábado en Jujuy como integrante de la comisión jurídica del Comité por la Libertad de Milagro Sala. Después de reunirse durante una hora con Morales, Ibarra visitó a la dirigente social en su lugar de detención, la Cárcel de Mujeres de Alto Comedero.

Refirió que en la conversación que mantuvo con Morales le planteó la situación del intendente Raúl Jorge, quien según el gobernador firmaba cheques para las cooperativas bajo presión: “¿Libra cheques presionado y no realiza una denuncia?”, demandó Ibarra.

-¿Cómo se organizó el encuentro con el gobernador?

-Como integrante del comité jurídico por la libertad de Milagro Sala junto con otros abogados, le pedí la reunión desde Buenos Aires, a través del gobierno nacional, y él me la dio enseguida.

-¿De qué hablaron?

-Hablamos al principio de varias cuestiones, como la cuestión energética en la provincia de Jujuy, pero después fuimos al tema por el cual le había pedido la reunión, que era Milagro Sala. Yo le expresé la preocupación por el hecho de que estuviera detenida sin condena. Porque si un juez condena, uno puede estar de acuerdo o no, pero cualquier persona debe cumplir con la detención. Pero en cambio tener a alguien con un proceso, sin condena, detenido, con las circunstancias que rodean toda esta situación, es preocupante. Y eso es lo que le manifesté al gobernador, digamos, como título de la visita.

-Obviamente el gobierno tiene una postura diferente. ¿Qué le contestó?

-El gobernador me dijo que este es un tema judicial, a lo que yo le dije que conozco las vinculaciones que ha habido, y no de ahora sino de mucho tiempo y en distintos lugares, entre la política y los jueces y fiscales. Yo fui fiscal general en la Ciudad de Buenos Aires, por lo que puedo hablar desde adentro sobre las cosas que he visto. Entonces, decir que se trata de un caso judicial es tener una visión muy limitada, porque pensar que Milagro Sala se vaya a fugar no es motivo para dejarla detenida, porque que yo sepa a Milagro no la encontraron escondida debajo de la cama, ni en otro país, ni la extraditaron, ni incumplió con las citaciones. Es más: es una líder social, y no se puede decir “por las dudas” cuando está en juego la libertad. Incluso si alguien tuviera dudas, que en este caso no hay ningún elemento para tenerlas, la decisión debería ser a favor de la libertad de la persona. Y sin embargo en este caso es exactamente al revés.

-¿Cree que es una persecución directa hacia Sala?

-Yo le dije: yo no estoy de acuerdo en todo lo que ustedes dicen que hizo Milagro Sala, pero vamos a suponer por un instante que lo hizo. ¿Ustedes creen que esto hubiera sido posible sin la complicidad de algún intendente? Y le dije que hasta el intendente de San salvador, que es de su partido, firmó todos los cheques, y en todo caso no controló. Sin embargo, no solo no está preso el intendente sino que además está protegido por el poder político, con abogados de Buenos Aires para que le armen una estrategia. Yo puedo entender que al gobierno provincial no le convenga que el intendente esté involucrado, porque además el 70 por ciento de los recursos pasaban por San Salvador; pero lo que no entiendo es que por un lado se proteja al intendente mientras Milagro Sala está detenida. Ese desfasaje me hace llegar a la conclusión de que hay una persecución política. Porque si no, no se entiende. Si hubiera dos o tres intendentes detenidos con Milagro Sala, podría ser un autoritarismo con el cual no estoy de acuerdo, pero al menos sería un autoritarismo parejo para todos. Pero no es así: a unos los protegen y a Milagro Sala la tienen detenida.

Y tampoco coincido cuando dicen que hizo todo lo que dicen que hizo, las presiones, el miedo… Le dije: los métodos políticos son métodos políticos, uno puede estar de acuerdo o no, nos pueden gustar mucho o poco, pero no estamos discutiendo esto, porque esto es sobre el derecho penal y estamos hablando de la libertad de las personas. Yo, si tengo diferencias políticas, las confronto políticamente, y no a través de tribunales con jueces y fiscales que responden al gobierno. Me parece que están confundiendo la pelea política usando el Código Penal y tirándole a alguien en la cabeza todo el aparato político, judicial y mediático. Esta es la realidad que se vive.

-¿Qué le decía Morales a todo esto?

-Básicamente dice que es una cuestión judicial, y que si los intendentes firmaron era porque estaban presionados. Pero yo pregunto, ¿presionado el intendente? ¿Libra cheques presionado y no realiza una denuncia? Son dirigentes políticos, tienen cargos institucionales, esto no es obediencia debida, no es dictadura. ¿A Milagro le tiran con todos los cañones, con todo el aparato político, judicial y mediático, y el intendente de San Salvador de Jujuy que firmó durante años “estaba presionado”? ¿Entonces después de tantos años de presión arma ahora una estrategia diseñada junto con el gobierno y con abogados que les trajeron de Buenos Aires? La verdad, no suena como ley pareja. Esto, más allá de que nos guste o no nos guste Milagro Sala, insisto, porque no estamos discutiendo gustos sino derecho penal, delitos y la libertad de una persona.

-Al menos hasta ahora, lo único que parece haber son muchos testimonios pero pocas pruebas.

-Claro. Y además están ahora las presiones sobre la diputada Balconte, que termina con un intento de suicidio. En mi conversación con el gobernador, tomé el ejemplo de Moyano y le dije: ¿Usted sabe las presiones que han hecho? Y sin embargo a nadie se le ocurre tenerlo preso a Moyano, o hacer que cada cosa que hagan camioneros sea responsabilidad directa de Moyano. Acá en cambio cada cosa que hace alguien de la Tupac o de organizaciones y cooperativas cercanas, ya es culpa de Milagro Sala. Eso se puede hacer en el discurso político, pero cuando hablamos de derecho penal, hay que ser muy cuidadoso. Porque además esto es una rueda que gira, y no diré que a Morales o a cualquiera le puede ocurrir una situación así el día de mañana, porque los derechos deben ser para todos. Lo que pasa es que hay quienes cuando llegan al poder se olvidan y creen que siempre van a estar arriba, cuando la verdad es otra. Entonces, pelear por los derechos de Milagro Sala es pelear por el derecho de todos. Insisto: no estamos hablando de gustos, no estamos hablando de si me gusta o no un escrache o lo que fuere; y que un escrache termine en una causa penal con alguien detenido, me parece un riesgo muy muy grande para la democracia.

-¿Qué acciones va a realizar el comité por la liberación de Milagro Sala?

-Primero es la discusión, porque hay causas, hay fiscales y jueces, y a eso hay que discutirle judicialmente. Eso ya lo están haciendo los abogados, y muy bien, como la abogada Gómez Alcorta y otros. A partir de ahí, la idea es generar en los medios un tratamiento de los temas jurídicos para poder entenderse, para que no se hable en clave. Y está también el trabajo internacional. El sábado estuvimos en la cárcel con Milagro Sala, y estuvieron también diputados del Frente Amplio de Uruguay. En suma, estamos trabajando en todos los niveles, porque entendemos que Milagro es una presa política, pero esto no es por ella sino que es por todos, porque cuando se pone en juego el poder político, judicial y mediático, y está en juego la libertad de una persona, pierde toda la democracia.