La CGT, la CTA de los Trabajadores y los movimientos sociales más cercanos al Gobierno marcharon desde el Obelisco al Congreso. La cúpula de la principal central obrera, integrada por Héctor Daer, Pablo Moyano y Carlos Acuña, exigió al gobierno que «tome las medidas que tenga que tomar».
«La inflación alcanzó niveles intolerables que pulverizan el poder de compra de los trabajadores y, mucha de la responsabilidad, depende de sectores que se apropiaron de ganancias en tiempo de pérdidas para los trabajadores», advirtió la CGT en un documento que tiene como consigna «Primero la Patria».
El cotitular de la CGT Héctor Daer afirmó hoy que la central sindical quiere que «los trabajadores sean formales» y que no haya «trabajadores de primera y de segunda», al referirse al proyecto oficial para transformar los planes sociales en empleo genuino.
«Es necesario encontrar una salida a favor y no llevar una salida como pretenden los sectores de concentración económica que presionan en favor de un proceso devaluatorio que empobrecerían al pueblo y aumentaría la masa de pobreza estructural», advirtió Daer.
Mientras que Moyano pidió al presidente Alberto Fernández que «siente en la mesa a los que remarcan los precios». «No se la pueden llevar de arriba, porque se la vienen llevando de arriba desde la dictadura», aseguró.
El dirigente de Camioneros propuso que, si el Gobierno quiere recaudar dólares, «tendría que estatizar las balanzas que están en los puertos. Ellos mismos se pesan su producto y lo venden ¿Quién los controla?».
«La expectativa es que los empresarios entiendan que no se puede vivir remarcando», afirmó Carlos Acuña, secretario general de la CGT y del Sindicato de Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio, en plena movilización desde el centro porteño.
Advirtió que «si no hay consumo no hay demanda» y que «cada vez hay menos trabajo».
«No puede ser que hoy firmes una paritaria y al otro día te aumentaron todos los precios, es una carrera que la perdemos los trabajadores», describió el sindicalista sobre los desafíos ante la crisis económica.
Los movimientos sociales marcaron también sus presencias en el Obelisco con columnas de la UTEP, Somos Barrios de Pie, Movimiento Evita, el Frente Popular Darío Santillán, Corriente Clasista y Combativa, Liberación Popular y La Dignidad.
«Es un mensaje para que el Gobierno se recueste sobre la movilización popular», aseguró Daniel Menéndez, quien integra la actual gestión como subsecretario de Políticas de Integración y Formación en el Ministerio de Desarrollo Social.
En este sentido, el coordinador nacional de Barrios de Pie agregó: «Que sepa el Gobierno que el problema no se resuelve con cuadros de Excel y técnicos, se resuelve convocando a la sociedad a movilizarse, entendiendo que hay que estabilizar la economía, pero también defender el poder adquisitivo”.
Por otro lado, apuntó contra los sectores especulativos que «defienden sus intereses» y que buscan «maximizar sus ganancias no entendiendo que hay sectores de la sociedad que no van a ver cómo se empobrece y se pierde el poder adquisitivo».
Y concluyó: «No se puede ser feliz en un país donde la mayoría de la gente vive con penurias. Vamos a movilizar por nuestros derechos con un Gobierno que, aun en este contexto, se ponga firme, entienda y encuentre un punto donde podamos transitar y sacar adelante la situación difícil».