El ministro de Transporte, Mario Meoni, anticipó hoy que la reanudación de los vuelos de cabotaje, que estaba prevista para el 15 de julio, se postergará «por un tiempo» en virtud de la cantidad de contagios que se registraron en los últimos días, tanto en el AMBA como en otros puntos del país, que motivaron un endurecimiento de restricciones de circulación.
«Hay conectividad de vuelos especiales a algunas provincias, eso va a ir incrementándose a medida que las actividades de las provincias vayan aumentando», dijo el ministro en declaraciones radiales, y agregó que «el protocolo está listo, íbamos a implementarlo a mediados de julio, pero por la cantidad de casos lo postergamos un tiempo».
El ministro señaló que estaban «trabajando con Aerolíneas Argentinas en un protocolo, el cual ya está listo, para vuelos de cabotaje e internacionales».
«Esperábamos ponerlo en funcionamiento a mediados de julio, esperábamos empezar con la interconexión entre provincias que no tuvieran circulación comunitaria de COVID, pero dadas las circunstancias de un incremento notorio en la Ciudad de Buenos Aires, no podemos garantizar que no transportemos el virus desde Buenos Aires hacia algunas provincias», lamentó.
«Hay muchos gobernadores que tienen temor así que estamos haciendo consultas con cada uno de los responsables del transporte en las provincias para ver en qué momento los gobernadores lo consideran posible. De todas maneras, hay conectividad entre provincias, hay vuelos especiales, en algunos lugares hay regular por ejemplo semanal con Tierra del Fuego, Santa Cruz, Neuquén, pero son pedidos de cada gobernador», añadió.
Apuntó, además, que tienen la reactivación «en suspenso ahora porque en los próximos 15 días esperamos una situación muy crítica en la Ciudad de Buenos Aires y esto iría a contramano del gran esfuerzo que estamos haciendo para bajar la circulación de personas. Priorizamos la salud por encima de cualquier otra actividad».
En otro orden, advirtió que «desde mañana sí o sí se necesitará el permiso nuevo habilitado para circular», y que esperan «una reducción en la circulación del 30% para mañana», aunque aclaró que «no se va a sancionar a nadie que salga por motivos de fuerza mayor».
Respecto a la posibilidad de bloquear el uso de la SUBE indicó que «no tiene sentido», porque «hay situaciones de fuerza mayor que hay que considerar», y enfatizó que el sentido de las disposiciones es «cuidar la vida y la salud, no castigar».
«Estamos en un momento excepcional, lo que queremos hacer es proteger a la gente. Por eso le seguimos pidiendo a los usuarios un esfuerzo para cortar con la circulación de quienes no son trabajadores esenciales», sostuvo.
En cuanto a los pedidos de circulación, señaló que «bajó la cantidad de permisos pedidos porque bajó la cantidad de actividades permitidas. Estimamos que habrá una baja del 50 por ciento y eso impactará en el transporte público y la movilidad en general».