Para garantizar el servicio de agua potable tendría que llover, pero no mucho

Como “un escenario muy complicado” describió a El Submarino Fernando Rosenbluth, titular de Agua de los Andes, en relación a los cortes de servicio que programó la empresa ante el aumento de consumo por las altas temperaturas. Estudian modificar el sistema de captación de agua para no depender exclusivamente de factores naturales.

Ayer más de media ciudad tuvo cortes del servicio de agua potable, que debía restablecerse por completo esta mañana, aunque la persistencia de las altas temperaturas hace temer por nuevas interrupciones.

 “En este momento estamos en un escenario muy complicado, porque el calor hace que los usuarios consuman mucha más agua, mientras que nuestros afluentes están secos”, explicó Rosenbluth.

 La poca cantidad de agua para potabilizar hace que se resientan los niveles de las cisternas y bajen las reservas. “Para que suban los niveles no nos queda otra que efectuar estos cortes en forma rotativa por distintos sectores de nuestra ciudad”, señaló.

 Consultado sobre cómo se puede resolver el problema, Rosenbluth dejó todo en manos de la naturaleza: “­Necesitamos que llueva para que haya agua en los ríos”, afirmó. Claro que si llueve demasiado puede haber exceso de agua y presentarse problemas de turbiedad, aclaró, y precisó: “Si la lluvia es constante y si es poca, no perjudica, pero las tormentas fuertes sí”.

 Así, con el sistema de captación vigente, no hay mucho más que esperar que el clima ayude. “Estamos analizando el sistema de perforación de pozos. El costo es mayor, pero en estos días se presentará un plan para que en los próximos años apostemos a las perforaciones, aunque sea para esta parte del año”, adelantó Rosenbluth.

 Recordó de todos modos que el año pasado los cortes empezaron en agosto, y que ahora se han logrado algunas mejoras, como la inauguración de dos cisternas que funcionan como reservorio.