Quieren crear un protocolo de atención al embarazo adolescente

Las estadísticas muestran que el embarazo adolescente en Jujuy es más frecuente que en otras provincias del país. En ese marco, se realizó una capacitación sobre el tema, dirigida a funcionarios de Desarrollo Humano y Salud, que tiene como fin último la elaboración de un protocolo de atención al embarazo en menores de 15 años. 

La actividad se realizó en Salón Ateneo del Hospital Quintana, en el marco del convenio de la provincia con Unicef para la reducción de morbi–mortalidad materno infantil. 

Ana Rodríguez, titular de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, indicó: «Las estadísticas de maternidad e infancia del Ministerio de Salud nos dicen que el embarazo adolescente es una de las problemáticas de mayor índice en la provincia, y nos preguntamos si esos embarazos son producto del deseo propio de la joven o de un abuso».

La funcionaria destacó que la atención de los casos de abuso ha generado que «la población y las niñas han comenzado a denunciar, hablar y tener confianza con este sistema de protección”.

Por su parte Gabriela Ferreyra Jenks, directora de Protección Integral de Niñez, Adolescencia y Familia explicó que en el caso de embarazo adolescente, las Oficinas de Protección de Derechos de niños, niñas y adolescentes (OPD), de acuerdo a las circunstancias articulan con las áreas pertinentes de los organismos estatales, y orientan a las jóvenes para que reciban los tratamientos adecuados, además de la contención y el acompañamiento que reciben por parte de equipos interdisciplinarios.

Por otra parte, refiriéndose a la protección de derechos frente a casos de embarazos producto del abuso sexual infantil, indicó que desde la Dirección se trabaja en los casos de emergencia a través de avisos a la línea 102 o de las OPD que están en toda la provincia. «Así, si el abuso es intrafamiliar, nos ocupamos de buscar redes familiares o comunitarias para proteger a esta persona, hasta tanto se resuelva de manera definitiva su situación», detalló, y agregó que se trabaja también «en la contención y acompañamiento de la familia de la niña o aolescente víctima del abuso, a través de un tratamiento psicológico o bien satisfaciendo otras necesidades que requiera la persona víctima de abuso, de acuerdo a las circunstancias”.

En los casos de abuso sexual infantil, se aplica la Acordada 200 del Protocolo para el Acceso a la Justicia de Niños y Niñas Víctimas o Testigos de Violencia, Abuso Sexual y otros Delitos, que establece que los primeros que toman conocimiento de una situación de abuso deben  hacer una denuncia penal y que es el fiscal el que centraliza el procedimiento judicial.

«Desde nuestra área -precisó Ferreyra Kenjs-, lo que se hace es acompañar a la persona víctima de este abuso, en el caso de que sea menor de edad en el acceso a un tratamiento psicológico, luego de haberse realizado las pericias pertinentes, como ser Cámara Gesell, para no frustrar una prueba que pueda ser importante para un proceso judicial, acompañando además otras circunstancias que amerite la situación para la protección de la niña o adolescente víctima”.

En tanto, la secretaria de Paridad y Genero, Soledad Sapag, describió el programa “Con más derecho más igualdad”, que se implementa desde su área, que «da las herramientas y conocimientos de los derechos de cada una de las personas para que puedan exigirlos», y destacó que dicho programa incluye «un proyecto especifico que es de embarazo precoz, que tiene como objetivo llegar a las adolescentes, jóvenes y niñas que están transitando un estado de embarazo o que ya hayan tenido a sus bebes y para que a pesar de esa situación puedan tener igualdad de oportunidades en el futuro”.