El Submarino Jujuy Noticias de Jujuy, Argentina y el mundo
Por Miguel López. En la bolsa de Nueva York el precio del azúcar llegó a 20,80 centavos de dólar por libra, alcanzando su nivel de compra más alto en 4 años. Analistas de la actividad económica azucarera aseguran que el aumento en el precio se debe a una escasez de suministro en el mundo y a una lenta cosecha en Brasil, principal productor, debido a condiciones climáticas desfavorables.
La oligarquía azucarera (Blaquier-Arrieta de Ledesma S.A.A.I.) y las multinacionales, como Seaboard Corporation(Ingenio El Tabacal) y Gloria S.A. (Ingenio San Isidro), amasarán una ganancia extraordinaria en esta zafra 2016.
Ya que el salto en el precio en el mercado mundial viene a sumarse a otros beneficios que adquirió el sector empresarial en los más de 6 meses que pasaron desde que comenzó la presidencia de Mauricio Macri, como ser la quita de toda retención a la exportación, y la suba de 2 puntos porcentuales en el corte de alcohol con naftas (de 10 a 12%).
Esto permitió que los empresarios liquiden el stock de zafras anteriores que tenían acumulados en depósitos y galpones, y se genere un aumento del precio del azúcar del 40% en el mercado interno, donde la bolsa de azúcar de 50 kilos, pasó de 200, precio en el que se encontraba estancado el producto desde hace 5 años, a 260 pesos. Se calcula que estas medidas económicas por parte del gobierno nacional sumarían 1.800 millones de pesos a las ganancias de las patronales azucareras.
La contracara: salarios deprimidos y condiciones laborales vulneradas
Las dulces ganancias de los empresarios y terratenientes azucareros tienen su contracara con la realidad que padecen los obreros. Los gremios azucareros peticionan un aumento del 40%, que significaría un salario básico de $12.900 y un salario de tira final de $16.966 para la categoría 1, y mejoras en las condiciones laborales, que siendo esquemáticos podemos resumir en 3 puntos comunes a todos los ingenios:
1- Que se respeten la estabilidad laboral, de 11 meses de trabajo para los temporarios. 2- Categorizaciones y efectividad para un mayor porcentaje de obreros. 3- La negativa al turno relevante o cuarto turno, régimen laboral que niega el derecho al sábado ingles y el descanso dominical.
La parte patronal se niega a otorgar un aumento cercano al costo de la canasta familiar, hoy fijada en 17.500 pesos, y más aún a modificar las condiciones laborales a favor de una mejora para los obreros del azúcar. Las respuestas de la patronal son propuestas de aumentos salariales por debajo de la inflación, que superara 40 por ciento en el año.
En el Ingenio San Isidro se acordó durante el mes de Abril un aumento del 34,6 por ciento (en un solo pago), que lleva al salario básico del obrero de la categoría 1 a 11.665 pesos y al salario de tira final a 16.363 pesos, y en los ingenios tucumanos, donde la FOTIA y los industriales acordaron un aumento del 35 por ciento (también en un solo pago y retroactivo a Mayo), que lleva al salario básico a 11.384 pesos y al salario de tira final a 13.721 pesos. Podrán ver que en los ingenios en que las direcciones sindicales y las patronales se pusieron de acuerdo, el aumento no se asoma al costo de la canasta familiar.
En su mayoría, los obreros de los ingenios donde todavía no se cerraron las paritarias opinan que el aumento conseguido en el ingenio San Isidro es solo un piso y que el aumento acordado en Tucumán está por debajo de sus necesidades, pese a que el aumento salarial se otorgue en un solo pago.
3 duras realidades obreras en los ingenios
Hay 3 realidades todavía peores en las tierras obreras del norte argentino, donde se viven momentos de dulces ganancias y amargos salarios. Veamos la primera situación, a los trabajadores de los ingenios Ledesma, El Tabacal y Rio Grande, los empresarios les ofrecen en promedio un aumento del 30%, con gran parte en sumas no remunerativas, cuando estos reclaman un aumento del 40%.
Vale decir, que ni dos de estos ingenios que son los que amasan las mayores ganancias del empresariado azucarero (en la zafra 2015 Ledesma S.A.A.I. tuvo una producción azucarera de unas 317.958.00 toneladas y Tabacal Agroindustrial produjo unas 170.494.000 toneladas), ni el otro ingenio en cuestión, que tiene una producción que está por arriba de la media en la rama azucarera (Rio Grande produjo en el mismo periodo unas 76.371.000 toneladas de azúcar), se acercan en sus ofertas a lo otorgado en concepto de aumento salarial por un ingenio mediano, como el ingenio San Isidro.
El cual en la última zafra genero unas 56.104.000 toneladas de azúcar, una producción claramente inferior a las tres empresas antes mencionadas. Lo que pone en evidencia que lo que está en juego para las empresas en estas paritarias es más que una cuestión meramente económica, ya que buscan imponer nuevas condiciones de dominación del capital sobre el trabajo.
En este sentido la pulseada por los salarios y las condiciones de trabajo pasa a convertirse en una puja por la hegemonía en la región. La segunda cuestión es más grave aún, en Ingenio El Tabacal, la actual administradora de capitales estadounidenses, Seaboard Corporation, busca aumentar su productividad y rentabilidad a costa de imponerles a los obreros el turno relevante o cuarto turno. Régimen laboral que reduciría los jornales de los trabajadores de 40 a 25 y produciría una caída en la masa salarial de un 45%.
Para concretar este plan reaccionario Tabacal Agroindustrial cuenta con el aval del Ministerio de Trabajo de Salta, ya que el gobernador Urtubey del PJ es un hombre cercano a la embajada norteamericana y cultiva una buena relación con el gobierno nacional Pro imperialista de Macri. Una medida patronal que ya hizo estragos con el salario y las condiciones laborales de los obreros del ingenio Ledesma, quienes todavía exigen el fin del llamado cuarto turno en la fábrica y el campo. Por lo que los obreros del Ingenio El Tabacal vienen resistiendo a su implementación desde hace 5 años.
La tercera y última realidad es catastrófica, ya que el gobierno provincial de Gerardo Morales busca despedir a 811 obreros del Ingenio La Esperanza, donde actualmente hay un plantel 1.350 trabajadores. El gobernador con la puesta en marcha del trabajo sucio de despedir a centenares, medida ilegal e ilegitima que cuenta hasta con una ley votada entre gallos y medianoche en la legislatura jujeña, busca dejar un plantel de poco mas de 500 obreros, para que la puesta en venta del ingenio sea más tentadora para empresarios interesados.
El veto a la ley anti despidos de Macri deja el terreno allanado para este tipo de medidas anti obreras que llevan adelante tanto los empresario del sector azucarero como los gobiernos provinciales del NOA, todos fervientes partidarios de las oligarquías regionales y las multinacionales.
Todas estas maniobras ofensivas del gran capital contra la fuerza de trabajo, en tiempos políticos de un gobierno de empresarios, no solo perjudican al trabajador, sino a su familia y al conjunto de la comunidad de los pueblos ingenios por donde circula el ingreso salarial de los obreros azucareros.
