Por Miguel López (Periodista – Diputado provincial FIT-U). Támara Rojas es una joven empleada administrativa de la municipalidad de El Talar, fue despedida en la segunda semana del mes de diciembre del 2024, justo antes de las fiestas de fin de año, por las autoridades comunales, lideradas por la intendenta, Laura Quintana del PJ, amigable del oficialismo provincial.
Además de ser injustamente despedida, la afectada es madre de una niña con Trastornos de Espectro Autista-TEA- y es único sostén de hogar.
El despido de Tamara Rojas a manos de un gobierno municipal del PJ es expresión de como el clima anti obrero y anti derechos generado por la gestión Milei es también acompañado con medidas políticas por gobiernos peronistas o radicales que de discurso dicen no coincidir con las medidas de La Libertad Avanza, pero luego también atacan a los trabajadores y al pueblo vía persecución laboral, mayor precarización, despidos, tarifazo, inflación, nuevos aranceles o represión a la protesta.
@leonardo.jerez8 casta! total tristeza en El Talar Jujuy. los políticos hacen lo que quieran con la gente que no es de su palo.#casta
La despedida no es la primera vez que padece ataques del ejecutivo municipal de El Talar a cargo del justicialismo díscolo de Quintana, ya que ni bien ingresada la nueva gestión municipal, allá por diciembre de 2023, la despidió junto a casi 100 empleados y obreros. En aquel momento luego de reclamar su reincorporación fue tomada nuevamente por el municipio, pero ya no como jornalizada, condición en la que se encontraba antes del despido, sino como trabajadora contratada con funciones a realizar en el concejo deliberante.
Así es que a principios de diciembre de 2024 desde la presidencia del Deliberante, a cargo de Gerardo López, le dicen, de palabra sin darle documentación alguna, que tiene que tomarse una licencia y que después regresaría a trabajar.
Tamara avisa en su lugar de trabajo de su consulta al médico e intenta entregar un parte médico que justificaba inasistencia de un par de días pero López se torna irascible y con claro maltrato verbal hacia ella le dice que no se lo va recibir y que estaba despedida, con el aval del vicepresidente del cuerpo, Lorgio Torres.
Así opero el fraude laboral, la persecución política, el despido discriminatorio y el abandono de persona con discapacidad que realizaron las autoridades máximas de la comuna.
Vale agregar como agravante que tras el despido de Tamara Rojas hubo un claro acto de clientelismo político llevado a cabo por López y Torres porque tras el despido injustificado, en su lugar, entraron cinco personas a trabajar en el Concejo.
Decimos persecución política porque Tamara Rojas es hija de un ex delegado y dirigente sindical azucarero y de una activista vecinal que junto a otros pobladores integran el colectivo Vecinos Autoconvocados en El Talar y reclaman contra los tarifazos del servicio de energía eléctrica que presta la empresa jujeña de energía (Ejesa), acompañan el reclamo de trabajadores municipales despedidos y piden obras para la localidad, siendo críticos de la gestión de Quintana.
Desde el bloque de diputados provinciales del FIT-U acompañamos el reclamo de reincorporación de Támara Rojas, madre de una niña con discapacidad y único sostén de hogar, y de los casi 100 despedidos de El Talar ya, basta de atropellos contra los trabajadores.