Desde temprano de fotógrafos y periodistas se convocaron fuera del Congreso para repudiar los balazos de goma y las detenciones arbitrarias que sufrieron sus colegas durante el tratamiento y la sanción de la reforma previsional. Bajo la consigna “No disparen contra la prensa, libertad para informar”, la Asociación de Reporteros Gráficos de la Argentina alertó que no hay garantías para el ejercicio de la prensa.
«Estamos reclamando que no nos baleen más a los trabajadores de prensa», explicó el presidente de Argra, Daniel Vides, en diálogo con el programa Te Quiero, sobre la consigna que hoy moviliza a los fotógrafos.
A la convocatoria a manifestar frente al Congreso adhirió también el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba). La violencia policial durante las manifestaciones contra el ajuste a las jubilaciones no distinguió entre fotógrafos y cronistas. En la manifestación del lunes 14 de diciembre hubo 36 fotógrafos, camarógrafos y cronistas heridos, según precisó el Sipreba. El jueves anterior, 12 fotógrafos fueron baleados, tres resultaron afectados por gases y chorros de los camiones hidrantes, y un periodista fue agredido por policías.
Vides relató que “la gran mayoría de los heridos fueron de balas de goma y no con piedrazos»; es decir, fueron blanco de los miembros de las fuerzas de seguridad desplegadas por el Gobierno. «Hay compañeros con hasta doce, catorce perdigones», consignó el titular de la Argra.
Entre los heridos, estuvo Pablo Piovano, reportero gráfico de larga trayectoria en PáginaI12. Él relató en primera persona que un oficial lo vio con su cámara y le disparó a medio metro 14 balazos de goma el jueves 14, el día que el oficialismo no pudo tratar el ajuste a los jubilados. Hoy estuvo en el centro de la escena de la protesta y recibió la solidaridad de sus colegas.