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El gobierno nacional envió al Congreso un proyecto de ley que elimina los feriados puente pero, a su vez, suma más fines de semana largos a partir del año que viene.
Actualmente, el decreto 1584/2010 es el que rige la metodología de feriados a nivel nacional, que fue firmado por la expresidenta Cristina Fernández.
En tanto la propuesta presentada por el actual gobierno justifica la modificación en base a la creencia que dicha norma impacta negativamente en la actividad productiva del país y en la educación de los jóvenes.
Puntualmente, los feriados nacionales cuyas fechas coincidan con los martes y miércoles serán trasladados al lunes anterior, mientras que los que caigan jueves y viernes serán trasladados al lunes siguiente.
El cambio fundamental es que ya no habrá fines de semana de cuatro días. El proyecto propone además que los feriados trasladables pasen de tres (17 de agosto, 12 de octubre y 20 de noviembre) a siete.
Desde el sector hotelero de Santa Fe, Mario Zavaleta, presidente de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica, sostuvo que estos cambios van en contra del sistema turístico. «Al haber menos feriados largos, la eliminación de los puentes afecta al desarrollo de las economías regionales sobre todo», analizó el representante del sector. En esa línea, desestimó el hecho de que los días no laborables influyeran en el cumplimiento del calendario escolar.
Zavaleta corroboró que la decisión generó sorpresa en el sector, dado que ningún referente a nivel nacional fue consultado antes de que se diera a conocer la decisión de modificar el calendario de feriados. «Esto ha sido una decisión del Ejecutivo. Ya antes de las elecciones, Macri había comentado algo y luego se desdijo», recordó el presidente de la AEHG Santa Fe.
«Lamentablemente el sector turístico se siente afectado», manifestó Zavaleta.
En vistas al vacío que podría generarse en la actividad, estimó que de ahora en adelante se deberá trabajar en conjunto con la Municipalidad y a través del Safetur, así como también con el área de Turismo de la provincia en vista a posicionar a Santa Fe como un destino turístico. «Indudablemente esto va a generar un importante nivel de competencia para que los turistas se sientan atraídos a determinadas regiones», vaticinó el representante del área.
Con un año que arrancó complicado y logró repuntar a mitad del mismo, los empresarios vaticinan un verano poco prometedor y es por esto que están a la expectativa de que se generen políticas que colaboren a promocionar a la ciudad como un destino tentador para los turistas. «No somos un destino de playa, estamos complicados. Tenemos que trabajar con algún segmento particular que pueda venir», analizó.
Agencia Federal de Noticias
