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La realización del 37° Encuentro Plurinacional de Mujeres y LTTBIN en Jujuy, que inicia este viernes, es la culminación de un proceso de organización que se extendió por todo el año, desde que la provincia fue elegida en Bariloche el año pasado como sede de esta edición. Un proceso que implicó el desafío de construir consensos y deja, además, una base que se proyecta al futuro como espacio de construcción de militancia.
Luz Díaz, integrante de la comisión organizadora del encuentro, calificó de «histórico» el evento que se va a desarrollar este fin de semana en Jujuy y recordó que el año pasado en Bariloche, donde se realizó la edición 2023, se aprobó que Jujuy fuera la sede de este año. «Estaban presentes delegaciones, hermanas del Tercer Malón de la Paz, y se propuso nuestra provincia por toda la lucha que se estaba dando», repasó en diálogo con El Submarino Radio (FM Conectar 91.5).
La apertura será este viernes a las 9 de la mañana, con una ceremonia ancestral y lectura de un documento en el escenario principal, ubicado en Av. 19 de Abril y Gorriti, frente a la Legislatura.
A partir de las 15 horas, darán comienzo las múltiples actividades previstas, que se van a suceder de manera simultánea en distintos puntos de la ciudad.
Como en cada Encuentro, lo central serán los más de cien talleres, que se van a desarrollar en escuelas y en la Facultad de Humanidades de la UNJu. «Son horizontales, referidos a todas las temáticas que nos atraviesan como movimiento de mujeres y diversidades y disidencias sexuales», definió Díaz, y aclaró que la participación en esas reuniones no requiere inscripción previa ni conocimiento específico sobre el tema en cuestión.
Las organizadoras estiman que el Encuentro va a reunir a unas 80 mil personas. Pese a que el año pasado en Bariloche asistieron cerca de 100 mil, el número previsto para esta ocasión es menor por la situación económica. «Se ha encarecido mucho el traslado, y recordemos que el encuentro es autogestivo, las compañeras y compañeres se organizan para poder venir, es un esfuerzo gigante», comentó Luz Díaz, y remarcó que «se trabajó para que hubiera alojamiento sin costo en las escuelas disponibles».
«También es importante que se conozca que este encuentro, aparte de ser un hecho político, va a generar mucho movimiento económico en la provincia», comentó Díaz, y mencionó la ocupación hotelera y el aporte para emprendedores, como los que participan del corredor gastronómico y de artesanías.
Durante los largos meses en que se fue organizando el encuentro, las referentas tuvieron además reuniones con organismos oficiales. El Ministerio de Salud dispuso un refuerzo de las guardias médicas y la presencia de una carpa del SAME cerca del escenario principal; con el Ejecutivo provincial y la UNJu se acordó la disposición de las escuelas y aulas para los talleres, y con la Municipalidad de San Salvador de Jujuy se convino todo lo necesario para las actividades que se van a realizar en plazas y espacios públicos de la ciudad.
«También tuvimos la declaración de interés de la Legislatura y del Concejo Deliberante, no solo de capital sino de otras localidades, ya que comprendieron la magnitud de este encuentro y han puesto a disposición sus circuitos turísticos y en algunos casos transporte para que las mujeres y disidencias del interior de la provincia puedan venir a San Salvador», relató Díaz.
Además, intendencias de distintas localidades se prepararon para recibir visitantes «de forma amigable y segura, porque muchas encuentreras aprovechan la ocasión también para pasear, y consultaron por el circuito de las yungas y la quebrada, por ejemplo».
«Es un encuentro muy masivo y eso es lo que se transmitió a las autoridades locales por parte de la comisión organizadora, para que todos tomen los recaudos pertinentes y hagan lo que les corresponde institucionalmente», señaló.
Las preocupaciones
Este 37° Encuentro se produce en un contexto preocupante por las políticas públicas -o la falta de ellas- del gobierno de Javier Milei referidas a las temáticas de género. Luz Díaz analizó: «El año pasado hablábamos sobre la implementación de los presupuestos, de cómo gestionar las herramientas políticas para la prevención de violencia de género, de cuestiones de salud sexual, por ejemplo. Ahora nos encontramos volviendo unos peldaños atrás, porque hablamos de la defensa de la universidad, de los presupuestos para la salud sexual, los métodos anticonceptivos, los tratamientos, la defensa del derecho a decidir sobre los cuerpos, la defensa de los espacios para prevenir violencia de género».
«Hoy ya no tenemos un ministerio, no tenemos Inadi, y esto nos enfrenta a tener que volver a reforzar estas redes políticas, que son amplias», agregó.
A horas de iniciar el Encuentro, Díaz hizo un balance del proceso de organización: «En lo personal, creo que esto nos ha dado una madurez política en lo que respecta al movimiento de mujeres, feminismos, transfeminismos. Espero que podamos mantener esa madurez para lo que se viene, para estar atentas; que nos deje el ejercicio de haber podido escuchar, disentir, sentar los consensos y sobre todo haber conocido a compañeras del resto de la provincia que a veces no sabemos que están y las articulaciones que hicimos a nivel nacional».
«Como militantes, esto nos deja un saldo importante -continuó-, que es poder unirnos, marcar una agenda y evidenciar y fortalecer estas redes, que se activan cuando las necesitamos, pero creo que tenemos que armar una agenda local que nos deje más fortalecidas».
