El Papa Francisco, nacido como Jorge Bergoglio en Buenos Aires, Argentina, falleció este lunes a las 7.35 horas (5.35 GMT) en su residencia de la Casa Santa Marta, según lo anunció en un vídeo mensaje el camarlengo, el cardenal Kevin Joseph Farrel.
«Con profundo dolor tengo que anunciar que el Papa Francisco ha muerto a las 7.35 horas de hoy, el obispo de Roma ha vuelto a la casa del padre, su vida entera ha estado dedicada servicio del Señor y de su Iglesia y nos ha enseñado el valor del evangelio con fidelidad, valor y amor universal y en manera particular a favor de los más pobres y marginados», anunció oficialmente Farrel.
Y continúo el cardenal en el video: «Con inmensa gratitud por su ejemplo como discípulo del Señor Jesús recomendamos el alma del papa Francisco al infinito amor misericordioso de Dios Uno e trino».
En el vídeo, grabado en la capilla de la Casa Santa Marta también aparecen el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin y el sustituto de la secretaria de Estado, el venezolano Edgar Peña Parra.
Su última Semana Santa
El Papa Francisco, aún convaleciente de su infección respiratoria, había aparecido el domingo en el balcón de la logia central de la basílica de San Pedro para la bendición Urbi et Orbi tras la misa del Domingo de Resurrección.
Francisco no había participado en ninguno de los ritos de la Semana Santa debido a que seguía recuperándose tras haber pasado 38 días en el hospital por una neumonía bilateral y haber sido dado de alta el 23 de marzo.
El Pontífice argentino permaneció sentado en la silla de ruedas, no llevaba las cánulas nasales para el oxígeno, deseó una «Buena Pascua» y pidió al maestro de ceremonias que leyese el mensaje de la Pascua ante las 35.000 personas congregadas en la plaza de San Pedro para la misa del Domingo de Resurrección, que fue oficiada por el cardenal Angelo Comastri.
El papa que nadie esperaba
Jorge Bergoglio pasará a la historia como el más relevante de nuestros compatriotas en la geopolítica mundial. Como un ingeniero espiritual, político y cultural del siglo XXI.
Transcurrido el duelo, los argentinos podremos reflexionar acerca de cómo vivimos los acontecimientos de estos 12 años de un pontificado innovador.
Argentina le ha dado un Papa al mundo. Es un acontecimiento que el devenir del tiempo no hará más que agigantar.
La dirigencia, de todo el arco político y de todos los ámbitos, deberá hacer un ejercicio de introspección para dimensionar si honró este acontecimiento que también hará entrar a la Argentina en la Historia. Queda su legado, que debería inspirar el sentido y la orientación de nuestras acciones futuras.
Primeros pasos en el Vaticano, tras el deceso del papa
Por otra parte, con su fallecimiento se inicia el período de Sede Vacante, una etapa prevista por el derecho canónico en la que se suspende la autoridad papal y cesan diversas actividades de la Curia Romana. En este lapso, el camerlengo queda a cargo de la administración de los asuntos ordinarios de la Santa Sede, mientras se organiza el cónclave en el que se elegirá a un nuevo papa.
Entre los rituales inmediatos, se procederá a la destrucción del Anillo del Pescador, el sello papal oficial, para evitar falsificaciones, y se anunciará formalmente el cronograma de velorio y funerales. El cuerpo del papa Francisco será velado durante varios días en la Basílica de San Pedro, donde ya comenzaron los preparativos para recibir a fieles, jefes de Estado y líderes religiosos de todo el mundo.
Aún no se confirmó dónde será sepultado el pontífice argentino. Esa información se conocerá en las próximas horas, cuando se difundan los detalles de su testamento. Entre las posibilidades se baraja la cripta vaticana, donde descansan otros papas, o alguna de las basílicas mayores de Roma.