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Este lunes, antes que comience la etapa de alegatos del juicio por delitos de lesa humanidad que se desarrolla en Jujuy, tres represores que están sentados en el banco de los acusados darán su versión de los hechos que se juzgan. Ellos son Arturo Morales, Oscar Francisco Guzmán y Francisco Lauralicio Díaz.
Morales está procesado por los delitos de privación ilegítima de la libertad, con el agravante de violencia o amenazas, y homicidio calificado por alevosía y con el concurso premeditado de dos o más personas, en grado de coautor, todos en concurso real.
Díaz está acusado por los delitos de privación ilegítima de la libertad, con el agravante de violencias o amenazas, del delito de torturas, en grado de coautor, todos en concurso real.
Guzmán está procesado por los delitos de privación ilegítima de la libertad con el agravante de violencias o amenazas, y del delito de torturas, en grado de coautor, todos en concurso real.
Además de estos tres represores, se pueden sumar el resto de los procesados. A continuación, si el Tribunal lo dispone, podría comenzar la etapa de alegatos, con el de las querellas. La sentencia saldrá en el 2018, informó el Tribunal.
En la etapa de alegatos, después de las querellas, sigue el turno del Ministerio Público Fiscal, previsto para el 4 de diciembre. Siguen el año que viene en febrero con los alegatos de las defensas públicas y de los distintos defensores particulares que hay en este juicio, no se sabe depende de lo que surja se harán duplicas o replicas, pero fijaron fecha ya de 19 de febrero de 2018 a las 8 de la mañana el dictado de la sentencia.
Los hechos
La causa se refiere a la detención de cinco personas en tres operativos desplegados en San Pedro entre 1976 y 1977. Todas ellas fueron alojadas en la Seccional 9 de esa ciudad, donde funcionó un Centro Clandestino de Detención. Allí fueron sometidos a torturas y vejaciones.
En el primer operativo, el 21 de septiembre de 1976, fue secuestrado Víctor Jesús Segura, que tenía 24 años y estudiaba en la Universidad Nacional de Tucumán. Permanece como desaparecido.
Otras tres víctimas son Jenny Aquin Exeni, que tenía 18 años; Delmira Élida Garnica, de 31, y Juan Carlos Valenzuela, de 34, todos ellos sobrevivientes.
Los tres fueron secuestrados cuando se dirigían de San Salvador a San Pedro en el auto de Valenzuela, y trasladados a la seccional 9, donde fueron alojados de manera ilegal, torturados y sometidos a condiciones inhumanas de detención.
En relación con el hecho del que fueron víctimas estos tres jóvenes, hay otra causa abierta por la violación de Garnica y Valenzuela.
En el último de los hechos que se ventilan en este juicio, Antonio Elías Díaz fue secuestrado por personal de la Policía provincial durante un allanamiento ilegal en su casa en San Pedro de Jujuy, cuando estaba con su amigo, Raúl Oscar Nacer.
En la requisitoria fiscal se detallan las torturas que padecieron las víctimas en la Seccional 9, que fueron relatadas en la etapa de instrucción por los sobrevivientes.
El comisario Arturo Rubén Morales era el hermano de Enrique Morales quien era el jefe de la dependencia policial y, de acuerdo a los testimonios, quien comandaba al grupo y era el dueño y amo de la vida de los sanpedreños, tal como relató su hija Nancy Morales en diálogo con El Submarino Radio.
