Caso Loan: Una especialista en trata opinó que «a este Estado no le interesa la vida de los niños»

La religiosa jujeña Gabriela Burgos integró como representante de la Fundación Alameda el Comité Ejecutivo de Lucha Contra la Trata y Explotación de Personas. Hoy el Comité ya no existe. Desde Alameda, tres días después de la desaparición de Loan Peña en Corrientes, de quien se desconoce el paradero hace casi dos semanas, presentaron una denuncia ante la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex) pidiendo que el caso pasara al fuero federal.

«Vimos irregularidades desde el primer momento. La mamá dijo ‘se lo llevaron’; un comisario, en lugar de estar aportando datos, empezó a amenazar a los vecinos del pueblo para que no vayan a la marcha a la comisaría. Hay muchos indicadores que nos decían que le estaban dando caramelitos a los pumas, sin buscar nada», señaló Burgos en diálogo con El Submarino Radio (FM Conectar 91.5). 

El pequeño Loan Peña, de cinco años de edad, desapareció en la localidad de 9 de Julio, provincia de Corrientes, hace 13 días. Hay cinco personas detenidas imputadas por la captación del chico, mientras que el el comisario Walter Maciel quedó imputado por encubrimiento.

Antonio Benítez, tío de Loan; Mónica del Carmen Millapi y Daniel “Fierrito” Ramírez, una pareja amiga de Benítez, están señalados como partícipes primarios de la captación del niño. Carlos Pérez, un capitán de navío retirado, y su esposa, la exfuncionaria municipal María Victoria Caillava, están señalados como presuntos coautores materiales, a cargo de “la organización”, según informaron los fiscales provinciales Guillermo Barry y Juan Carlos Castillo en conferencia de prensa. La causa pasó a la justicia federal.

Como integrante de la Fundación Alameda, la religiosa fue funcionaria del Comité Ejecutivo de Lucha Contra la Trata y Explotación de Personas, que hasta la asunción del gobierno de Javier Milei dependía de la Jefatura de Gabinete de la Nación. Burgos describió la tarea del Comité: «Nosotros hemos trabajado durante cuatro años en la implementación de políticas de Estado, para que en todas las provincias se respeten y se restauren tres derechos fundamentales de las víctimas: el derecho al trabajo, el derecho a un acompañamiento psicológico y el derecho a una vivienda».

Entre 2019 y 2023, el Comité fue evaluado por la ONU. «Siempre estuvimos como el segundo país que mejor luchaba contra la trata de personas. Fue por eso que se nos confió la creación de la plataforma latinoamericana para luchar contra este delito», recordó Burgos, y afirmó: «Hoy el Comité ya no existe».

-¿Qué está viendo en el caso de Loan?

-Tiene muchas particularidades e indicadores de un posible caso de trata de persona. La trata tiene muchos pasos. El primero es el señalamiento. La primera imagen de Loan que se viralizó en las redes sociales es de él almorzando con la familia. Ahí se ve la mirada del exmarino y la exfuncionaria; la mirada de los adultos, excepto la del papá. Parecen unos buitres. Eso en los pasos de la trata se llama señalamiento. La adulta o el adulto mandan fotos a las redes de proxenetas, y ellos eligen a su víctima.

-¿Cuáles son los siguientes pasos?

-El segundo paso es la captación. El tercero es el traslado, sacar a la persona de su centro de vida, de sus vínculos más profundos, para vulnerarla más, hacer que no tenga fuerza, quebrar su voluntad. Esto mucho más en un niño de cinco años, que recién está formando su identidad. Y el siguiente paso es la explotación de la víctima.

-¿Cuál cree que podría ser el objetivo en este caso?

-Desde la experiencia y el conocimiento, podemos sospechar que sea para la explotación sexual, para producir imágenes de abuso sexual infantil y luego venderlas a las plataformas pedofílicas o pornográficas. Los menores son muy requeridos, porque hay una demanda de pedófilos que están al acecho de estas imágenes. Además, en el caso de Loan estamos hablando de una provincia de frontera. 9 de Julio es un pueblo pequeño, de 4000 habitantes, con un índice de vulnerabilidad social muy alto. Estamos hablando de una familia que vive en los cordones periurbanos, que tampoco tenía mucho conocimiento de la existencia de este delito, aunque sí sabían que desaparecían menores de edad en Corrientes y en su pueblo.

-¿Qué opina del involucramiento de la exfuncionaria municipal?

-Acá se ve otro indicador de la trata de personas. Esa mujer es además exintendenta, y visitaba a las familias más vulnerables de la zona. Manejaba recursos humanos y económicos y tenía poder en el lugar. Trabajaba con (el gobernador Gustavo) Valdés y militó para (la ministra de Seguridad) Patricia Bullrich. Ella puede haber sido un eslabón fundamental para los proxenetas. Lo que ella quizás nunca se imaginó es que las organizaciones o redes mafiosas, cuando no les sos funcional, te descartan.

-En el caso de Loan se cuestiona la actuación de la justicia provincial en las primeras horas. ¿Qué puede decir sobre eso?

-No se puede comprender que el Alerta Sofía haya sido emitido por un juzgado de garantías, dando espacio a la intervención de la policía provincial, que no tienen experiencia en estos caso. Las convenciones nos dicen además que no es recomendable porque puede existir connivencia, complicidad en el delito. Lo vemos en el caso de Loan: hay tres detenidos que pertenecían al Estado. Nosotros en Jujuy nunca hemos visto a las fuerzas provinciales interviniendo, siempre han dado lugar a la justicia federal. El Consejo Federal y el Comité de Lucha son las organizaciones expertas en la materia. En este caso hay otra particularidad, y es que Corrientes nunca adhirió a ninguno de los convenios que teníamos en el Comité. Siempre fueron reacios a que la lucha contra trata de personas se instale en esa provincia. Nunca se pudo.

-¿Cree que se va a encontrar a Loan?

-Desde la fe, porque soy una persona creyente, consagrada al Dios de la vida, de la justicia y del reino de los pobres, digo que el milagro puede existir. Pero conociendo el modus operandi de estas mafias, es muy difícil que a un niño de 5 años, que ya reconoce rostros, voces, lo vayan a dejar. Que Dios y la Virgen, San Antonio, permitan que se lo encuentre, que sea un caso excepcional; pero desde la realidad, desde la experiencia, debo decir que es muy difícil. Yo ruego a Dios todos los días que aparezca, con vida o sin vida. Porque mucho más llevadero es vivir sabiendo que el cuerpo de tu ser querido está en un lugar, que no saber dónde está.

La trata, un delito que no termina

Burgos recordó algunos de los casos en los que trabajó el Comité: «El último fue en Tartagal, un bebé que desapareció a horas de nacer, a sí que no teníamos ni foto ni nada. Se activó el alerta Sofía y la justicia federal mandó el oficio para bloquear las rutas, para evitar que el bebé salga del perímetro donde se encontraba el hospital. Y se lo encontró».

Estas acciones de búsqueda están dictadas por protocolos establecidos en convenciones internacionales. Uno de los puntos más importantes es la actuación de la justicia federal, que es el fuero que tiene la competencia para activar los dispositivos necesarios para dar con la persona desaparecida. «Está la alerta amarilla, que pertenece a Interpol; la CNRT, que se ocupa de controlar el transporte; la Aduana, los peajes, todo lo necesario», detalló.

En el caso del bebé de Tartagal, comentó, la búsqueda tuvo un buen resultado. «Con Loan hubiese pasado lo mismo si se procedía como nos dicen las convenciones internacionales», comentó Burgos.

Sobre la situación en Jujuy, la religiosa dijo que no hay registros de desaparición de bebés, aunque sí de las llamadas adopciones ilegales. Pero son casos que datan de 20 o 30 años. Y describió el recorrido hasta la actualidad: «Nosotros empezamos a conocer lo que era la trata de personas recién en 2002. Se institucionaliza en 2008, cuando tenemos la primera ley. Y en 2012, a la luz del fallo del caso de Marita Verón, se modifica la ley».

«Somos un país relativamente joven con respecto a este delito, en comparación con Europa. Si bien siempre existió la trata, no estaba tipificada como delito», agregó.

La especialista explicó que la trata de personas tiene diferentes modalidades y que es un delito que se adapta de acuerdo a la realidad cultural, política, social, económica de una región. En este sentido, mencionó la la trata con fines de explotación sexual, «que es la más común»; la laboral; la mendicidad forzada, en la que se secuestra a menores de edad para explotarlos en las calles a través de la mendicidad; el matrimonio forzoso, que se da en algunos lugares, por ejemplo en Santiago del Estero y La Pampa, en relación a comunidades menonitas que lo practican; la trata con fines de extracción y venta de órganos o fluidos del cuerpo, y las organizaciones coercitivas, mal conocidas como sectas.

«También tenemos algo que aún no está tipificado en la jurisprudencia argentina, que es la subrogación materna; el llamado alquiler de vientres -completó-. España está empezando a tipificarlo como delito entre las modalidades de trata. Pero en la Argentina hay casos aislados. Muchas veces lo hacen ver como una cuestión loable, de caridad, pero no es así».

Más allá de los matices, aclaró, este delito «tiene una sola finalidad, que es la explotación de un ser humano».

Por otro lado, remarcó que «es un negocio que nunca termina, porque una persona puede ser vendida muchísimas veces a lo largo de su vida, hasta ser recuperada».

«La trata de personas es realizada por una organización, una red criminal, que funciona de manera muy organizada. Y para exista en una región, en una provincia o en un pueblo, sí o sí necesitan la complicidad de los diferentes poderes», señaló Burgos.

-¿Qué se debe saber sobre este tipo de delito?

-Hay una cuestión con los medios de comunicación o las películas, que a veces instalan un estereotipo en el tema de la trata de personas. Como en películas como Búsqueda Implacable o Sonidos de la Libertad. Está bueno mirarlas como entretenimiento, pero hacen pensar que no es algo próximo a nosotros, que sucede en otros lugares. Pero es importante saber que todos los días tenemos Loans.

-Con el desmantelamiento de las áreas del Estado que se ocupaban de este tema, la situación se vuelve grave.

-Exacto. Estamos hablando de recuperar personas, seres humanos. El Estado tiene la obligación de buscar a las personas que desaparecen. No es un favor que nos hacen. Hoy, el Estado nos está diciendo a todos: ‘no llegás a fin de mes, y además no voy a cuidar lo que vos más amás’. El caso de Loan está tocando las fibras, los hilos más sensibles de nuestra sociedad, que son los niños.

-La ministra Bullrich dijo que toda la información sobre el caso Loan se va a mantener en secreto. ¿Qué opina?

-Eso es ir a contratiempo, porque ya no hay nada que no se pueda saber. Pasaron 13 días y el protocolo de búsqueda de personas dice que las primeras 48 horas son fundamentales. Nosotros en el Comité hemos encontrado a menores en menos de 24 horas. Cuando se aplican los protocolos y las orientaciones, no se comenten tantos errores y se salvan vidas. Pero a este Estado no le interesa la vida de los niños. No le interesamos nosotros, directamente. Cuando se desmantelan instituciones esenciales para la lucha contra este delito, se está dejando paso libre para los proxenetas.

Dejá tu comentario. [Nos reservamos el derecho de eliminar los contenidos ofensivos o discriminatorios.]

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

x

Check Also

Un freno al seguro obligatorio de salud: Veto o decisión judicial

El Seguro Provincial de Salud (Seprosa) podría desaparecer antes de su implementación si prospera alguna de las iniciativas que se están ...